En un anuncio sorprendente, el Primer Ministro de Ontario, Doug Ford, ha revelado planes ambiciosos para abordar la congestión del tráfico en el Área Metropolitana de Toronto (GTA) mediante la construcción de un túnel masivo bajo la Autopista 401. Este proyecto, si se lleva a cabo, se extendería desde Brampton hasta Scarborough, cubriendo aproximadamente 60 kilómetros y sirviendo como una vía rápida de doble propósito tanto para automóviles como para el transporte público.
Durante una conferencia de prensa en Etobicoke, Ford destacó la necesidad urgente de este proyecto, citando estadísticas que muestran que la congestión del tráfico en la GTA cuesta a Ontario aproximadamente 11 mil millones de dólares en productividad perdida cada año. “Este túnel y autopista rápida reducirán la congestión, apoyarán el crecimiento económico y ayudarán a que las personas se desplacen más rápido”, afirmó Ford. A pesar de la posibilidad de una elección anticipada en Ontario, Ford prometió que su gobierno llevará a cabo el proyecto independientemente de los resultados de un estudio de viabilidad interno.
El Ministerio de Transporte de Ontario evaluará la viabilidad del túnel, incluyendo posibles rutas dentro del derecho de paso existente, el número de carriles, la longitud y el diseño de los intercambios que conectan con otras autopistas. El túnel no tendría peajes e incluiría opciones de transporte público, según la provincia.
Ford también aprovechó la oportunidad para criticar a los partidos de oposición, acusándolos de estar “en contra de todo” y de preferir que Ontario permanezca “estancada”. Tanto el NDP como los Liberales se espera que respondan formalmente al anuncio de Ford en algún momento del miércoles.
El anuncio se produce en un momento crítico para el gobierno de Ford, que ha enfrentado múltiples desafíos en los últimos meses. La capacidad del gobierno para avanzar con este proyecto será una prueba crucial de su estabilidad y apoyo en el Parlamento.