El gobierno francés ha denunciado que Rusia está detrás de una campaña digital que busca crear controversia y división en Francia, a raíz de las estrellas de David que aparecieron pintadas en varios lugares de París el pasado mes de octubre. Según el ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Yves Le Drian, se trata de una operación de desinformación y manipulación, que pretende exacerbar el antisemitismo y el antisionismo en el país.
Las estrellas de David, que son el símbolo del judaísmo y de Israel, fueron pintadas con aerosol en las paredes de varios edificios públicos y privados de París, como el Ayuntamiento, la Asamblea Nacional, el Museo del Louvre o la Torre Eiffel. Las autoridades francesas condenaron estos actos de vandalismo, y abrieron una investigación para identificar a los responsables.
Sin embargo, poco después de que se conocieran los hechos, se difundieron en las redes sociales y en algunos medios de comunicación digitales, imágenes y vídeos que mostraban a personas con chalecos amarillos, el movimiento de protesta social que surgió en Francia en 2018, realizando las pintadas. Estas publicaciones, que se hicieron virales, acusaban a los chalecos amarillos de ser antisemitas y de estar al servicio de Israel.
El gobierno francés ha desmentido estas acusaciones, y ha señalado que se trata de un montaje orquestado por Rusia, con el fin de desacreditar al movimiento de los chalecos amarillos, y de generar tensión y conflicto en la sociedad francesa. Según el ministro Le Drian, las imágenes y los vídeos fueron manipulados y editados, y se utilizaron cuentas falsas y bots para difundirlos masivamente.
El ministro ha afirmado que tiene pruebas de que la campaña digital fue coordinada por la Agencia de Investigación de Internet (IRA), una entidad vinculada al gobierno ruso, que se dedica a realizar operaciones de injerencia e influencia en otros países, mediante el uso de las redes sociales y de la propaganda. El ministro ha anunciado que presentará una queja formal ante Rusia, y que tomará medidas para proteger la soberanía y la seguridad de Francia.