THE LATIN VOX (9 de septiembre del 2025).- Por Daniela Medina.
En un giro histórico, el primer ministro francés, François Bayrou, sufrió este lunes una humillante derrota en una moción de confianza de la Asamblea Nacional, lo que marcó el fin de su mandato apenas nueve meses después de asumir el cargo. El suceso refleja la profunda crisis política y económica que se cierne sobre Francia bajo el liderazgo del presidente Emmanuel Macron. A continuación, te presentamos un análisis exhaustivo en tres ejes esenciales para entender este vuelco.
1. Un Parlamento ingobernable tras elecciones fallidas
En 2024, Macron apostó por convocar elecciones legislativas anticipadas, con la esperanza de lograr una mayoría estable tras una dura derrota del partido presidencial en las elecciones europeas. Sin embargo, el resultado fue contrario a sus expectativas: el nuevo Parlamento se fragmentó, sin una mayoría clara.
Desde entonces, Francia ha tenido cuatro primeros ministros en dos años. Bayrou, quien encabezaba su cuarto gabinete, se convirtió en el tercero en caer en este período convulso. A pesar de sus esfuerzos por consolidar un Ejecutivo funcional, su proyecto de recortes presupuestarios por más de 50.000 millones de dólares fracasó.
2. Deuda pública insostenible y un modelo económico en jaque
El otro gran desafío que debilitó al gobierno fue el económico. Francia enfrenta una brecha preocupante: su deuda pública alcanza casi el 114 % del PIB, con un déficit anual cercano al 5,5 %. El envejecimiento de la población complica aún más la situación: hay menos contribuyentes activos mientras crece el número de pensionistas y beneficiarios de programas sociales costosos.
Bayrou, al describir un país en “respiración asistida”, planteó la necesidad de reajustar programas heredados, como las pensiones. Sin embargo, esa vía encontró una fuerte resistencia parlamentaria, especialmente por parte de la izquierda, que exigía un enfoque centrado en aumentar impuestos, no recortar prestaciones.
3. ¿Qué sigue ahora? Intensa incertidumbre política
Con la renuncia de Bayrou, Macron enfrenta una disyuntiva compleja: nombrar un nuevo primer ministro que enfrente la misma asamblea hostil o, en el extremo, disolverla y arriesgarse a nuevas elecciones bajo un clima más adverso.
En apenas dos años, ya se ha nombrado a Bayrou después de destituir a Michel Barnier (cuya gestión duró solo meses). Ahora, las opciones para un nuevo primer ministro incluyen figuras como Sébastien Lecornu, ministro de Defensa y cercano a Macron, o líderes de la izquierda como Olivier Faure, en busca de un acercamiento necesario para gobernar con algo de estabilidad. Acento
Resumen visual de la situación
| Aspecto | Detalle |
|---|---|
| Crisis política | Parlamento dividido sin mayoría clara; cuarto primer ministro nombrado en dos años |
| Urgencia económica | Deuda al 114 % del PIB; presión demográfica e insostenibilidad fiscal |
| Dilema actual | Nombrar un nuevo primer ministro o convocar elecciones anticipadas |
| Candidatos en escena | Standouts: Lecornu (centrista) o figuras de izquierda como Olivier Faure |
| Escenario futuro | Alta incertidumbre; necesidad de pactos amplios o riesgo de inestabilidad |
Francia en la encrucijada
El hundimiento del gobierno Bayrou refleja una Francia atrapada entre su pesada herencia fiscal, un Parlamento en conflicto permanente y una ciudadanía cada vez más exigente. Macron necesita encontrar el equilibrio político sin ceder sus planes de reforma, todo con la mirada puesta en las presidenciales de 2027.
Esto no es solo un ajuste de gabinete: es un aviso claro de que la Quinta República está tocando su momento de fragilidad política más aguda en décadas.
Fuente: www.bbc.com
Foto: www.infobae.com