
THE LATIN VOX (18 de septiembre de 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Un hallazgo excepcional sacude el mundo del arte: un retrato de Dora Maar pintado por Pablo Picasso en 1943, y que no se había visto en público desde hace ocho décadas, fue presentado este jueves por la casa de subastas Lucien Paris.
La obra, titulada “Busto de mujer con sombrero floreado (Dora Maar)”, fue realizada en el París ocupado por los nazis, en los últimos meses de la tormentosa relación de nueve años entre Picasso y Maar. El cuadro, de 80 por 60 centímetros, ha permanecido en manos privadas desde que un coleccionista francés lo adquirió en agosto de 1944, poco antes de la liberación de la capital.
Una Dora distinta
A diferencia de los retratos más célebres y desgarrados de Maar, como La mujer que llora (La Femme qui pleure), el recién revelado lienzo muestra un enfoque más suave y colorido. Su rostro, fragmentado y sin perspectiva, aparece sin embargo al borde de las lágrimas: un eco tanto del sufrimiento personal de la fotógrafa como de la inminente ruptura con Picasso, quien ya había decidido dejarla por la joven artista Françoise Gilot.
La propia Maar, figura central del surrealismo, se resistía a ser vista solo como musa. Sobre las múltiples representaciones que Picasso hizo de ella, llegó a decir: “Todos sus retratos de mí son mentiras. Son Picassos, ninguno es Dora Maar”.
Arte en tiempos oscuros
Durante la ocupación alemana, las autoridades nazis calificaban la obra de Picasso como “arte degenerado”, lo que le valió amenazas y registros en su taller de la Rue des Grands Augustins. Pese a ello, el pintor malagueño siguió trabajando sin descanso. Para el subastador Christophe Lucien, el redescubrimiento del cuadro tiene un doble valor:
“No solo es un hito en la historia del arte, también lo es en la vida íntima de Picasso. Es un retrato refrescante de Dora, lleno de emoción y luz en medio de los días oscuros de la ocupación”.
Camino a la subasta
El óleo, estimado de manera conservadora en 8 millones de euros, será exhibido durante tres días en París antes de salir a subasta el próximo 24 de octubre. Los expertos prevén que su valor final supere ampliamente esa cifra, dado que se trata de una obra inédita y documentada únicamente por una fotografía en blanco y negro de la época.
Con su salida a la luz, el retrato perdido de Dora Maar no solo enriquece la comprensión del universo picassiano, sino que también recuerda la compleja y dolorosa relación entre el artista y una de las mujeres más influyentes —y menos reconocidas— en su vida y en su obra.
Crédito fotográfico: France 24