El gobierno de Dina Boluarte mantiene conflicto abierto con sindicatos y organizaciones de la sociedad civil que viene realizando movilizaciones y paralizaciones escalonadas desde hace un mes debido a la ola de inseguridad ciudadana, sobre todo de extorsiones y asesinatos.
El conflicto se agudiza en los días próximos a que en el Perú se desarrolle el foro Asia Pacífico conocido como APEC. El jefe del Gabinete Técnico o vocero de gobierno, Fredy Hinojosa, informó a la prensa que quienes realicen manifetstaciones durante los días en los que se desarrollará el Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC) son «traidores a los intereses de la patria».
El primer ministro Gustavo Adrianzén se manifestó en similares términos considerando de antemano como violentistas a quienes convocan al paro nacional.
«De realizarse, quienes azucen la manifestación serán capturados. “No vamos a permitir el vandalismo. No vamos a permitir brotes de violencia. El gobierno es respetuoso del derecho de protesta, pero no tolera el vandalismo”.
El ministro de Salud, César Vásquez, reafirmó la actitud confrontacional del gobierno al decir que “solo los enemigos del Perú” podrían oponerse al desarrollo que impulsaría la cumbre.
Estas declaraciones se han tomado como una amenaza desde la sociedad civil que mayoritariamente apoya el paro nacional, más aún cuando el gobierno de Boluarte solicitó al Congreso el ingreso de 600 soldados estadounidenses con armas de guerra para supuestamente garantizar la seguridad de la cumbre.
El decano del Colegio de Abogados de Lima (CAL), Raúl Canelo, cuestionó esta medida:
“No puede ser que un país soberano acuda a la necesidad de que vengan fuerzas de otro país a dar la seguridad interna. Y no interesa si es de Estados Unidos, Rusia, China o quien fuere, porque no es admisible”.
En tanto, el paro nacional que se realizará el 13, 14 y 15 de noviembre se anunció también como una plataforma para visibilizar el problema de criminalidad en Perú, alertando a los líderes que llegan de otros países.
“Vamos a decirle al mundo entero que en el Perú estamos viviendo una inseguridad ciudadana, nos están matando. Cómo van a venir empresarios internacionales a invertir a una ciudad”, dijo Miguel Ángel Palomino, presidente de la Asociación Nacional de Conductores.
PRESIDENTA SIN APOYO POPULAR
Una reciente encuentas de la empresa CPI, del 2 de noviembre, revela que 93,2 por ciento opina que el gobierno fracasó en la lucha contra la delincuencia. La presidenta tiene 92% de desaprobación, según la encuesta Datum Internacional. Además, un 86,2 por ciento tiene poca (58,8) o ninguna (27,4) confianza en la Policía Nacional.