Los propietarios de viviendas en Canadá se enfrentan a una difícil decisión a la hora de elegir entre una hipoteca de tasa fija o variable, debido a las fluctuaciones del mercado y las expectativas de subida de los tipos de interés. Según los expertos, la elección dependerá de la situación financiera y personal de cada uno, así como de su tolerancia al riesgo.
Las hipotecas de tasa fija ofrecen una mayor seguridad y previsibilidad, ya que el propietario sabe cuánto pagará cada mes durante el plazo del contrato, que suele ser de entre uno y cinco años. Sin embargo, las hipotecas de tasa fija suelen tener un interés más alto que las de tasa variable, lo que significa que el propietario pagará más por el préstamo a largo plazo.
Las hipotecas de tasa variable, por su parte, tienen un interés más bajo que las de tasa fija, pero están sujetas a las variaciones del mercado y del índice al que están vinculadas, que suele ser el tipo preferencial de los bancos. Esto implica que el propietario puede beneficiarse de una bajada de los tipos, pero también puede verse afectado por una subida, lo que aumentaría sus pagos mensuales y su carga financiera.
La elección entre una hipoteca de tasa fija o variable se ha vuelto más compleja en los últimos meses, debido a la incertidumbre económica provocada por la pandemia de COVID-19 y a la posibilidad de que el Banco de Canadá empiece a subir los tipos de interés a partir del próximo año para contener la inflación. Según una encuesta realizada por la firma Ratehub.ca, el 57 por ciento de los canadienses optaría por una hipoteca de tasa fija en la actualidad, mientras que el 43 por ciento se inclinaría por una de tasa variable.
Los expertos recomiendan a los propietarios que evalúen cuidadosamente sus ingresos, gastos, ahorros, objetivos y planes futuros antes de decidir qué tipo de hipoteca les conviene más. También aconsejan que consulten con un asesor financiero o un agente hipotecario para obtener una orientación personalizada y comparar las diferentes opciones disponibles en el mercado. Asimismo, sugieren que los propietarios revisen periódicamente sus condiciones hipotecarias y consideren la posibilidad de cambiar de tipo o renegociar su contrato si encuentran una oferta más favorable o si cambia su situación.