En un giro inesperado, Hunter Biden, hijo del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, ha decidido cambiar su declaración de no culpable en el caso de impuestos federales que enfrenta. La noticia fue confirmada por su abogado defensor, Abbe Lowell, justo cuando estaba a punto de comenzar la selección del jurado en Los Ángeles.
Hunter Biden, de 54 años, enfrenta cargos por un presunto esquema para evitar el pago de más de 1 millón de dólares en impuestos durante un período de cuatro años, mientras obtenía millones de dólares de entidades comerciales extranjeras. Este cambio de declaración se produce pocos meses después de que fuera condenado por cargos de posesión de armas en un caso separado.
El caso ha atraído una considerable atención mediática y política, especialmente por las acusaciones de corrupción que los republicanos han lanzado contra el presidente Biden en relación con los negocios de su hijo en el extranjero. Aunque estas acusaciones no han sido respaldadas por pruebas concretas, han sido un punto de discusión recurrente en el panorama político estadounidense.
Hunter Biden llegó al tribunal acompañado de su esposa, Melissa Cohen Biden, y escoltado por agentes del Servicio Secreto. Inicialmente, había declarado no ser culpable de los cargos relacionados con sus impuestos de 2016 a 2019, y sus abogados habían indicado que argumentarían que no actuó “intencionalmente” para violar la ley, en parte debido a sus bien documentados problemas con el alcohol y la adicción a las drogas.
El cambio de declaración podría permitir a Hunter Biden evitar un juicio que se esperaba pusiera un foco intenso sobre sus negocios en el extranjero, algo que los republicanos han estado investigando durante años. Además, las posibles repercusiones políticas del juicio, a pocas semanas de las elecciones presidenciales, podrían haber disminuido desde que el presidente Biden decidió retirarse de la carrera de 2024 en julio.
Este caso también ha tenido un impacto emocional significativo en el presidente Biden, quien está profundamente preocupado por el bienestar de su hijo en los últimos meses de su carrera política de cinco décadas. La familia Biden ha sido un tema constante de escrutinio, y este último desarrollo seguramente continuará siendo un punto de interés tanto para los medios como para el público.