Los reguladores de aerolíneas en Estados Unidos han iniciado una investigación después de que una cubierta del motor en un Boeing 737-800 se desprendiera durante el despegue y golpeara un flap del ala. El vuelo de Southwest Airlines regresó de manera segura al Aeropuerto Internacional de Denver alrededor de las 08:15 hora local (15:15 GMT) después de haber salido originalmente hacia Houston. La aeronave llevaba 135 pasajeros y seis miembros de la tripulación.
Este incidente ocurre mientras Boeing ha estado bajo escrutinio en los últimos tiempos debido a preocupaciones sobre fabricación y seguridad. Southwest Airlines informó que sus equipos de mantenimiento revisarán el Boeing 737-800 después de que su cubierta, que protege el motor del avión, se desprendiera. Según los registros de la Administración Federal de Aviación (FAA), el avión fue fabricado en 2015, y el 737-800 es una generación anterior al modelo Max actual. La FAA indicó que la aeronave de Boeing fue remolcada hasta la puerta después de aterrizar. Boeing se abstuvo de hacer comentarios cuando se le preguntó por la BBC, remitiendo las preguntas a Southwest para obtener información sobre las operaciones de la aerolínea y su flota. Southwest anunció que llevaría a los pasajeros en otro avión a Houston, con un retraso de aproximadamente tres horas.
La compañía ha estado tratando de reparar su reputación después de un dramático estallido en pleno vuelo en enero, en el que los pasajeros en un vuelo de Portland, Oregón, a California escaparon por poco de lesiones graves. Además, Boeing pagó 160 millones de dólares a Alaska Air para compensar las pérdidas sufridas por la aerolínea tras la emergencia. Reguladores temporalmente suspendieron cerca de 200 aviones Boeing 737 Max 9 después de que un tapón de puerta se desprendiera de una aeronave de Alaska poco después del despegue. Los populares aviones 737 Max de Boeing fueron posteriormente retirados de servicio a nivel global durante más de 18 meses.