En un evento que combina política y gastronomía, Kamala Harris visitó el restaurante Baby Brasa en el West Village de Manhattan, propiedad del chef peruano Franco Noriega. La vicepresidenta de Estados Unidos, de 59 años, que sería la nominada demócrata para las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos, degustó platos como el lomo saltado e ingredientes como el ají amarillo. Durante su visita, resaltó la importancia de apoyar a pequeños negocios y aprendió sobre la gran gastronomía peruana.
El chef Franco Noriega, reconocido por su habilidad culinaria y carisma, recibió a Harris con entusiasmo. Juntos prepararon el emblemático lomo saltado, un plato que fusiona técnicas e ingredientes peruanos y asiáticos, reflejando la diversidad cultural del país inca. En un video compartido en redes sociales, Harris se mostró curiosa por los ingredientes y las técnicas culinarias utilizadas en la preparación del platillo. Noriega explicó la influencia de la inmigración japonesa y china en la gastronomía peruana, destacando la riqueza cultural que existe en Estados Unidos.
Esta interacción entre la política estadounidense y el chef peruano demuestra cómo la cocina puede servir de puente cultural y apoyo a los emprendedores. Kamala Harris, con su amor por la gastronomía y su interés en aprender más sobre distintas culturas, se convierte en un ejemplo de cómo la comida une a las personas y enriquece la vida social y política.