Los panaderos de Calgary se enfrentan a una escasez de azúcar y a un aumento de los precios debido a la huelga de los trabajadores de Rogers Sugar, que llevan casi dos meses sin trabajar. La empresa, que produce el 90 por ciento del azúcar refinado de Canadá, tiene su planta principal en Vancouver, donde unos 200 empleados están en huelga desde el 28 de septiembre.
Los trabajadores, representados por el Sindicato de Trabajadores Públicos y Privados de Canadá (PPWC), reclaman mejores condiciones laborales, salariales y de jubilación. Según el presidente del PPWC, Adrian Soldera, la empresa ha aumentado la carga de trabajo y los turnos continuos, lo que afecta a la salud y la seguridad de los empleados.
La huelga ha provocado que el suministro de azúcar se reduzca drásticamente en el mercado canadiense, lo que ha obligado a los panaderos a buscar alternativas o a pagar más por el producto. Algunos negocios de Calgary, como la panadería Glamorgan Bakery, han tenido que recurrir a proveedores estadounidenses o a marcas menos conocidas para abastecerse de azúcar.
“Estamos pagando casi el doble de lo que pagábamos antes”, dijo Bernie Goetz, propietario de Glamorgan Bakery. Goetz afirmó que la huelga le está costando unos 2.000 dólares extra al mes, y que no puede trasladar ese costo a los clientes, especialmente en la temporada navideña, cuando la demanda de productos dulces es mayor.
Otros panaderos, como el dueño de Yann Haute Patisserie, Yann Blanchard, han optado por reducir la cantidad de azúcar que utilizan en sus recetas, o por sustituirlo por otros ingredientes, como la miel o el jarabe de arce. Blanchard dijo que espera que la huelga se resuelva pronto, ya que el azúcar es un ingrediente esencial para la pastelería francesa.
Por su parte, la empresa Lantic Inc., propietaria de Rogers Sugar, dijo en un comunicado que la planta de Vancouver está operando a un nivel que permite atender a los clientes, y que está dispuesta a negociar con el sindicato para llegar a un acuerdo que sea aceptable para ambas partes. Sin embargo, hasta el momento no hay señales de que las conversaciones se hayan reanudado.