La NASA se prepara para el lanzamiento consecutivo de dos satélites cúbicos destinados a la investigación climática. Estos pequeños satélites, conocidos como cubesats, forman parte de la misión Polar Radiant Energy in the Far Infrared Experiment (PREFIRE), que tiene como objetivo recopilar datos cruciales para mejorar los modelos climáticos de la Tierra.
El primer cubesat de la misión PREFIRE está programado para ser lanzado no antes del 22 de mayo desde el Complejo de Lanzamiento 1 de Rocket Lab en Nueva Zelanda, utilizando un cohete Electron. El segundo cubesat seguirá en una misión separada dentro de las tres semanas siguientes.
Cada uno de estos cubesats de 6 unidades alberga un espectrómetro térmico infrarrojo, una tecnología ya probada en otras misiones espaciales, pero adaptada para cumplir con las restricciones de tamaño y masa de los cubesats. Estos instrumentos recogerán información sobre las emisiones en longitudes de onda del infrarrojo lejano, superiores a 15 micrones, en los polos de la Tierra.
Los datos recopilados ayudarán a los científicos a comprender mejor cuánto calor pierde la Tierra al espacio en los polos, lo que puede utilizarse para perfeccionar los modelos climáticos. “El Ártico se está calentando más rápido que cualquier otro lugar en la Tierra. Eso tiene enormes consecuencias potenciales”, explicó Tristan L’Ecuyer, investigador principal de PREFIRE en la Universidad de Wisconsin-Madison.
La misión PREFIRE realizará las primeras mediciones detalladas del calor radiante emitido en los polos, lo que permitirá entender por primera vez cómo diferentes procesos en las regiones polares, como las nubes, la humedad en la atmósfera y el cambio de la superficie de hielo a líquido, afectan esa pérdida de calor.
El uso de dos cubesats permite realizar mediciones adicionales, ya que al estar lanzados en diferentes planos orbitales sincronizados con el sol, uno de los satélites pasará aproximadamente seis horas después del otro, permitiendo entender cómo los cambios, como el derretimiento de la capa de hielo o la formación de nubes, afectan a las emisiones.
Este enfoque inusual de lanzamientos dedicados de cubesats individuales en cohetes Electron es necesario para colocarlos en sus órbitas específicas requeridas. La NASA seleccionó a Rocket Lab para lanzar las naves espaciales PREFIRE en agosto de 2023 a través de una orden de tarea en el contrato Venture-class Acquisition of Dedicated and Rideshare (VADR).