THE LATIN VOX (2 de marzo del 2025).- Por Kael Ponce de Leon garcia.
En un hito histórico para la exploración espacial comercial, la nave espacial privada Blue Ghost, desarrollada por la empresa estadounidense Firefly Aerospace, ha logrado aterrizar en la superficie lunar.
Este logro marca la segunda vez que una nave espacial comercial alcanza la Luna, consolidando una nueva era en la carrera espacial impulsada por colaboraciones entre agencias espaciales y empresas privadas.
Blue Ghost despegó de la Tierra el 15 de enero de 2025 con la misión de explorar el Mar de las Crisis, un vasto cráter visible desde nuestro planeta. Después de orbitar la Luna durante dos semanas, la nave realizó un descenso exitoso, aterrizando suavemente en la superficie lunar. El equipo en las instalaciones de Firefly en Texas estalló en vítores al confirmar el éxito de la misión.
Este proyecto es parte de la iniciativa de la NASA denominada Commercial Lunar Payload Services (CLPS), que busca establecer una presencia lunar a largo plazo mediante la colaboración con empresas privadas.
Blue Ghost transporta diez instrumentos científicos de la NASA, diseñados para estudiar la composición lunar, el flujo de calor interno y la interacción del viento solar con el campo magnético terrestre.
El Dr. Simeon Barber, investigador en ciencias planetarias de la Open University, destacó la importancia de esta misión al señalar que Blue Ghost ha demostrado una tecnología crucial para aterrizajes lunares, similar a la utilizada durante la era Apolo.
La Luna se perfila como una plataforma de lanzamiento para futuras exploraciones espaciales, permitiendo a las empresas privadas desarrollar tecnologías más eficientes y sostenibles para la exploración lunar.
El aterrizaje de Blue Ghost sigue los pasos de otras misiones privadas recientes, como la de Intuitive Machines, cuya nave Odysseus aterrizó cerca del polo sur lunar en febrero de 2024. Aunque la misión de Odysseus tuvo un final abrupto debido a un aterrizaje accidentado, Blue Ghost ha logrado superar estos desafíos, posicionándose como un referente en la exploración lunar privada.
Con este aterrizaje, Firefly Aerospace y la NASA dan un paso más hacia el objetivo del programa Artemis de regresar humanos a la Luna de manera sostenible. La misión de Blue Ghost no solo amplía nuestro conocimiento científico sobre la Luna, sino que también abre nuevas oportunidades para futuras misiones tripuladas y la explotación de recursos lunares.
La colaboración entre la NASA y empresas privadas como Firefly Aerospace representa un modelo innovador para la exploración espacial, donde la competencia comercial y la innovación tecnológica juegan un papel crucial en la reducción de costos y el avance de la ciencia espacial. Este enfoque podría llevar a descubrimientos revolucionarios y a una mayor accesibilidad al espacio para futuras generaciones.