
THE LATIN VOX (24 de agosto del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
La población inmigrante en Estados Unidos, que llevaba más de medio siglo en constante crecimiento, ha registrado su mayor descenso en décadas.
Según un estudio del Pew Research Center, desde que Donald Trump retomó la presidencia en enero de 2025, el número de inmigrantes en el país cayó de un récord histórico de 53,3 millones a 51,9 millones en junio, es decir, una reducción superior a un millón de personas.
El informe revela que, en términos relativos, el peso de la inmigración en la sociedad estadounidense también ha disminuido: el 15,4 % de los residentes actuales son inmigrantes, frente al 15,8 % registrado en enero, la cifra más alta en la historia reciente.
Impacto laboral y políticas restrictivas
El estudio indica que unos 750.000 inmigrantes han salido de la fuerza laboral estadounidense desde enero, reduciendo la participación de trabajadores nacidos en el extranjero al 19 %.
Entre las causas, el Pew Research Center apunta tanto a las nuevas medidas adoptadas por Trump como a las restricciones al asilo implementadas por Joe Biden en 2024, que ya habían reducido de manera significativa los cruces fronterizos.
En apenas seis meses, Trump ha firmado 181 acciones ejecutivas en materia migratoria, que abarcan desde el freno a la llegada de nuevos inmigrantes hasta deportaciones masivas de residentes sin ciudadanía.
Paralelamente, una investigación del diario inglés The Guardian mostró que las detenciones diarias por parte del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) aumentaron un 268 % en comparación con junio de 2024, alcanzando cifras récord.
El informe también destaca que se han realizado más de 8.100 deportaciones a países que ni siquiera son el lugar de origen de las personas expulsadas.
El endurecimiento no se limita a la frontera. El Departamento de Estado anunció esta semana que revisará los expedientes de más de 55 millones de extranjeros con visas vigentes para determinar posibles revocaciones, una medida sin precedentes en la política migratoria reciente.
Cambios en los países de origen
Pese al retroceso general, México sigue siendo el principal país de origen de los inmigrantes en EE.UU., con más de 11 millones de residentes nacidos allí, lo que representa el 22 % del total. No obstante, su peso ha disminuido de manera sostenida: en 2010 los mexicanos representaban el 29 % de la población inmigrante, frente al 22 % actual.
Otros grupos relevantes son los originarios de India (3,2 millones, 6 %), China (3 millones, 6 %), Filipinas (2,1 millones, 4 %) y Cuba (1,7 millones, 3 %).
Una ofensiva sin señales de detenerse
El discurso de Trump, que presenta a la inmigración como una amenaza para la seguridad nacional, marca un giro radical frente a décadas en las que Estados Unidos se consolidó como principal destino migratorio del mundo. Su gobierno parece decidido a profundizar la ofensiva, incluso a costa de tensiones diplomáticas y críticas de organismos de derechos humanos.
La pregunta que muchos se hacen es si el país podrá sostener su dinamismo económico y social en un contexto de restricciones cada vez más severas a la inmigración, un factor que durante más de medio siglo fue considerado una de sus mayores fortalezas.
Crédito fotográfico: AOL.com