Los reguladores de valores de Estados Unidos han solicitado al tribunal que ordene al fundador de Tesla, Elon Musk, que testifique en su investigación sobre la posible adquisición de la compañía por parte de Twitter. Los reguladores quieren saber si Musk violó las normas de divulgación al anunciar en un tuit el 1 de octubre que había llegado a un acuerdo con Twitter para comprar Tesla por 420 dólares por acción.
La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) ha presentado una moción ante el tribunal federal de Manhattan para obligar a Musk a comparecer y entregar documentos relacionados con el supuesto acuerdo. La SEC sospecha que Musk pudo haber engañado al mercado y manipulado el precio de las acciones de Tesla con su tuit, que provocó una subida del 13% en el valor de la empresa.
La SEC ya había acusado a Musk de fraude en 2018 por otro tuit en el que afirmaba que tenía fondos suficientes para sacar a Tesla de bolsa. En aquel caso, Musk llegó a un acuerdo con la SEC para pagar una multa de 20 millones de dólares y renunciar a su cargo de presidente de Tesla. Además, se comprometió a someter sus comunicaciones públicas sobre la empresa a la supervisión de un abogado.
Sin embargo, la SEC alega que Musk no ha cumplido con ese acuerdo y que ha seguido publicando tuits sobre Tesla sin la debida revisión legal. Por eso, la SEC quiere interrogar a Musk sobre sus motivos para anunciar el supuesto acuerdo con Twitter y sobre las conversaciones que mantuvo con el director ejecutivo de Twitter, Jack Dorsey, al respecto.
Musk, por su parte, ha calificado la investigación de la SEC de “injustificada” y “sin fundamento”. Ha asegurado que su tuit sobre el acuerdo con Twitter era una broma y que no tenía intención de engañar a nadie. También ha dicho que no ha hablado con Dorsey sobre la compra de Tesla y que solo le envió un mensaje directo en Twitter para felicitarle por su cumpleaños.
El tribunal todavía no ha decidido si aceptará o no la petición de la SEC para obligar a Musk a declarar. Mientras tanto, las acciones de Tesla han caído un 4% desde el tuit de Musk sobre el acuerdo con Twitter.