El 11 de noviembre, Canadá conmemora el Día del Recuerdo, una fecha para honrar a los caídos en las guerras y conflictos en los que participó el país. Entre los veteranos y los militares en activo, hay muchos indígenas que se sienten orgullosos de su servicio y de su herencia.
Uno de ellos es el cabo Cody Boucher, un miembro de la Primera Nación de Saugeen que sirve en el Regimiento Real de Canadá. Boucher dice que se inspiró en su bisabuelo, que luchó en la Segunda Guerra Mundial y fue prisionero de guerra en Hong Kong. Boucher afirma que su bisabuelo le enseñó el valor del sacrificio y la resistencia.
Otro soldado indígena es el sargento mayor retirado Ray McKay, un miembro de la Nación Cree que sirvió en el ejército durante 35 años. McKay dice que se alistó para seguir los pasos de su padre, que también fue soldado. McKay cuenta que su padre le inculcó el respeto por la bandera canadiense y por los pueblos indígenas.
Los soldados indígenas tienen una larga historia de contribución al ejército canadiense. Según el Museo Canadiense de la Guerra, más de 12.000 indígenas sirvieron en las dos guerras mundiales y en la Guerra de Corea, y muchos más lo hicieron en misiones posteriores. Los indígenas aportaron sus habilidades, su cultura y su espíritu a las fuerzas armadas, y se enfrentaron a desafíos y discriminación tanto en el campo de batalla como en el hogar.
En el Día del Recuerdo, los soldados indígenas rinden homenaje a sus antepasados y a sus compañeros caídos, y también celebran su identidad y su pertenencia. Boucher dice que se siente honrado de llevar el uniforme y de representar a su comunidad. McKay dice que se siente orgulloso de ser indígena y de ser canadiense. Ambos coinciden en que el servicio militar es una forma de defender los valores y los derechos de su pueblo.