En una elección reñida, Masoud Pezeshkian, un político moderado, ha sido declarado el próximo presidente de Irán después de vencer a su rival conservador de línea dura en las elecciones presidenciales del viernes. Pezeshkian, de 69 años, reemplazará a Ebrahim Raisi, quien falleció en un accidente de helicóptero el mes pasado.
Después de ganar la segunda vuelta con el 53,7% de los votos, Pezeshkian prometió servir a todos los iraníes. En sus primeras declaraciones tras ser declarado ganador, expresó: “El camino difícil por delante no será fácil, excepto con su compañía, empatía y confianza”.
Pezeshkian, considerado un candidato centrista y reformista, obtuvo casi 16,4 millones de los más de 30 millones de votos emitidos, superando a Jalili, quien recibió alrededor de 13,5 millones de votos según el recuento oficial. El Ministerio del Interior declaró: “Al obtener la mayoría de los votos emitidos el viernes, Pezeshkian se ha convertido en el próximo presidente de Irán”.
El presidente ruso Vladimir Putin fue uno de los líderes mundiales que felicitó a Pezeshkian por su victoria, aunque los líderes occidentales aún no han respondido. La participación en la segunda vuelta fue del 49,8% en la ajustada carrera entre Pezeshkian, el único moderado en el campo original de cuatro candidatos, y el ex negociador nuclear Jalili, quien aboga por profundizar los lazos de Irán con Rusia y China. A pesar de la baja participación histórica en las elecciones anteriores, Pezeshkian recibió aproximadamente el 42,5% de los votos y Jalili alrededor del 38,7%.
La elección de Pezeshkian como presidente podría tener implicaciones significativas para la política exterior de Irán y su relación con el mundo. Esperamos ver cómo su enfoque pragmático y reformista afectará la dinámica regional e internacional en los próximos años.