El gobierno de Nueva Escocia presentó la Ley de Medidas Financieras (2025), que incluye reformas fiscales significativas destinadas a abordar la crisis de vivienda en la provincia. Entre las medidas más destacadas se encuentra el aumento del impuesto de transferencia de escrituras para compradores no residentes, que pasa del 5% al 10%.
Esta iniciativa busca frenar la especulación inmobiliaria por parte de personas que no residen en la provincia, con el objetivo de facilitar el acceso a la vivienda para los habitantes locales. El ministro de Finanzas y Consejo del Tesoro, Allan MacMaster, afirmó que estas medidas son esenciales para garantizar que los residentes de Nueva Escocia tengan mayores oportunidades de adquirir viviendas asequibles.
Además del incremento en el impuesto de transferencia, la ley introduce otras reformas fiscales. A partir del 1 de enero de 2025, el monto personal básico aumentará de $8,744 a $11,744, lo que proporcionará alivio fiscal a los contribuyentes de la provincia. Asimismo, se reducirá la tasa impositiva para pequeñas empresas al 1.5% y se incrementará el umbral de deducción para estas entidades a $700,000, medidas que entrarán en vigor el 1 de abril.
La ley también contempla cambios en la infraestructura de transporte de Halifax. Se eliminarán los peajes en los puentes del puerto de Halifax, y la Comisión de Puentes Halifax-Dartmouth se convertirá en una corporación de la Corona provincial. Esta modificación busca mejorar la movilidad urbana y reducir los costos de transporte para los residentes.
Para abordar la escasez de viviendas, se extenderá hasta el 25 de noviembre de 2026 la aprobación rápida de proyectos de desarrollo habitacional en el Municipio Regional de Halifax. Además, se continuará con la suspensión de la remisión de asuntos de planificación a comités asesores y consejos comunitarios hasta la misma fecha, y se permitirá al ministro congelar los cargos de desarrollo para el municipio o Halifax Water según sea necesario.
Estas medidas reflejan el compromiso del gobierno de Nueva Escocia para enfrentar desafíos económicos y sociales, buscando un equilibrio entre el crecimiento económico y el bienestar de sus ciudadanos.