Las autoridades de salud pública de la provincia han confirmado la presencia de una nueva subvariante del coronavirus responsable del COVID-19, conocida como EG.5 o Eris, que está propagándose en Nuevo Brunswick, Canadá y otras regiones del mundo. Eris parece ser más contagiosa y capaz de evadir nuestras defensas inmunológicas, pero hay evidencia limitada que sugiere que cause síntomas más graves que sus predecesoras, según lo informado por la Organización Mundial de la Salud.
El número de casos confirmados de EG.5 en Nuevo Brunswick es actualmente muy bajo, aunque no se especifica el número exacto ni cuándo comenzó. Esta subvariante ha estado circulando en el país desde mayo y se ha detectado en varias provincias, según la Agencia de Salud Pública de Canadá. Ha estado aumentando de manera constante entre las muestras nacionales desde principios de julio, luego de detecciones esporádicas en meses anteriores.
Las autoridades de salud pública en Nuevo Brunswick se están preparando para ofrecer una dosis de refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 en otoño, junto con las vacunas contra la gripe estacional y el neumococo. La información relevante sobre estas vacunas se comunicará al público cuando esté disponible. Se espera que las próximas vacunas contra el COVID-19 se dirijan a las subvariantes más recientes de la variante Ómicron, como XBB.1.5, de la cual EG.5 se deriva.
Aunque algunos indicadores de la actividad del COVID-19 siguen variando después de un largo período de disminución gradual, podría ser un signo temprano de un aumento en la actividad, según la Agencia de Salud Pública. Además, el número de pacientes hospitalizados por COVID-19 ha aumentado ligeramente a nivel nacional del 2 al 8 de agosto.
Se han informado casos de EG.5 en al menos otros 50 países. La vigilancia y el monitoreo continuos de las nuevas variantes del virus siguen siendo fundamentales para controlar la propagación del COVID-19 y mitigar su impacto.