
THE LATIN VOX (27 de enero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
En un mundo que enfrenta el resurgimiento de discursos de odio y negacionismo, el 27 de enero de 2025 marca un aniversario crucial: ochenta años desde la liberación del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau.
Este campo, donde más de un millón de judíos fueron brutalmente asesinados, se ha convertido en un sombrío símbolo del Holocausto y de las atrocidades cometidas por el régimen nazi. En este día, el Primer Ministro de Canadá, Justin Trudeau, emitió una declaración que resuena profundamente en nuestras conciencias colectivas.
«El Holocausto fue uno de los episodios más oscuros de la historia humana», afirmó Trudeau, recordando que el régimen nazi exterminó sistemática y cruelmente a seis millones de judíos, dos tercios de la población judía de Europa. También destacó el asesinato de otros grupos perseguidos, incluyendo 500,000 romaníes y sintis, personas con discapacidades, opositores políticos y miembros de la comunidad 2SLGBTQI+.
La declaración también señaló el impacto perdurable en los sobrevivientes y en las generaciones posteriores: «El dolor infligido a los sobrevivientes del Holocausto aún se siente hoy. No podemos devolver las vidas perdidas ni completar las historias interrumpidas, pero podemos recordar.»
En un contexto de creciente antisemitismo y odio, esta conmemoración adquiere una relevancia renovada. En los últimos 15 meses, tras los ataques de Hamas contra Israel y el aumento de incidentes antisemitas, muchas comunidades judías en Canadá y el mundo han experimentado inseguridad en sus espacios públicos y privados.
Esto es «inaceptable», subrayó el Primer Ministro, y enfatizó las medidas que el gobierno canadiense está implementando para combatir el odio: desde programas de seguridad comunitaria hasta una Estrategia Nacional Antirracismo, y proyectos específicos como el Foro Nacional sobre el Combate al Antisemitismo, que se celebrará en marzo.
La tecnología, aunque poderosa, también plantea nuevos desafíos. Las redes sociales han servido como plataforma para el negacionismo del Holocausto y la distorsión de hechos históricos. Frente a esta amenaza, Trudeau instó a «recordar, escuchar y compartir las historias de los sobrevivientes mientras aún estén con nosotros».
Este compromiso se refuerza con la promesa de nuevos proyectos financiados a través del Programa Nacional de Conmemoración del Holocausto, destinados a educar a los canadienses sobre este capítulo oscuro y a destacar las formas en que el antisemitismo sigue afectando a la sociedad hoy en día.
En un día como hoy, no sólo recordamos las vidas perdidas, sino también honramos el valor de quienes resistieron y arriesgaron sus vidas para salvar a otros. Recordamos también nuestra obligación compartida: garantizar que las palabras «Nunca más» sean más que un lamento; sean una acción.
La historia del Holocausto no debe desvanecerse en el olvido, ni ser relegada a un simple capítulo en los libros de texto. Es un recordatorio vivo de lo que puede ocurrir cuando el odio y la indiferencia se imponen. Este 27 de enero, recordemos y reafirmemos nuestra responsabilidad de construir un futuro donde la dignidad humana prevalezca sobre el odio.
Crédito fotográfico: U.S. Mission to the OAS