El gobierno de Ontario ha anunciado que la reducción del impuesto a la gasolina, implementada inicialmente como una medida temporal, se convertirá en permanente. Esta decisión busca aliviar la carga económica de los ciudadanos y mitigar el impacto del aumento de los precios de los combustibles.
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, destacó que esta medida es esencial para mantener la asequibilidad de la vida diaria de las familias de la provincia. La reducción del impuesto a la gasolina, que entró en vigor en 2022, ha supuesto un ahorro significativo para los conductores, y su permanencia busca consolidar este beneficio.
La decisión de Ontario se produce en un contexto en el que otras provincias también están evaluando sus políticas fiscales relacionadas con los combustibles. Por ejemplo, Manitoba ha considerado medidas similares para aliviar la carga sobre los consumidores.
La permanencia de esta reducción fiscal en Ontario representa un esfuerzo por parte del gobierno provincial para contrarrestar los efectos de los impuestos federales sobre el carbono y otros factores que influyen en el precio de los combustibles. Se espera que esta medida contribuya a mantener estables los costos de transporte y otros sectores dependientes del combustible en la provincia.