THE LATIN VOX (14 de diciembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, ha propuesto una táctica poco convencional para contrarrestar las amenazas de aranceles de Donald Trump, sugiriendo que la provincia podría utilizar su Junta de Control de Bebidas Alcohólicas, el mayor comprador de alcohol del mundo, para frenar las importaciones de productos estadounidenses.
Ford, quien ha sido conocido por su estilo directo, expresó que podría tomar medidas drásticas como respuesta a la amenaza de Trump de imponer aranceles a Canadá. Esta propuesta se sumó a su advertencia anterior de que Ontario podría suspender las exportaciones de electricidad a varios estados estadounidenses, como represalia por la política comercial agresiva del presidente electo de EE. UU.
El enfrentamiento comenzó a intensificarse después de que Trump, en su discurso sobre las políticas comerciales, criticara a Canadá por lo que él considera un subsidio indirecto a su economía.
Trump afirmó que su país está «subvencionando» a Canadá con más de 100 mil millones de dólares al año, aunque no ofreció detalles adicionales sobre esa cifra. En respuesta, Ford calificó la amenaza de Trump de «un puñal en el corazón», haciendo alusión a la cercana relación entre ambos países, tradicionalmente aliados.
La Junta de Control de Bebidas Alcohólicas de Ontario, creada en 1927, es el principal minorista de alcohol de la provincia y genera ingresos de más de 7 mil millones de dólares canadienses al año.
Si Ford decide aplicar la amenaza de suspender las importaciones, esto tendría un impacto significativo, no solo por la cantidad de productos adquiridos por la junta, sino también por el poder de compra que tiene debido a la población de Ontario, que supera los 15 millones de habitantes.
A pesar de que Ford advirtió que la suspensión de las exportaciones de electricidad sería «el último recurso», su postura ha puesto a la provincia en una posición de confrontación con el gobierno de EE. UU. Ontario es una de las provincias que más depende del comercio con los Estados Unidos, lo que convierte cualquier represalia en una estrategia arriesgada.
«Estamos enviando un mensaje claro a EE. UU. Si atacan a Ontario, atacan a la vida de las personas en Ontario y en Canadá, y vamos a usar todas las herramientas a nuestra disposición para defendernos», dijo Ford, esperando que no se llegue a la confrontación total.
Además de la posibilidad de cortar el suministro de electricidad a estados como Michigan, Nueva York y Minnesota, el gobierno de Ford también está considerando restringir las exportaciones de minerales canadienses críticos, necesarios para la fabricación de baterías de vehículos eléctricos, lo que afectaría a la cadena de suministro de la industria automotriz de EE. UU.
Sin embargo, la postura de Ford no es respaldada por todos los primeros ministros de Canadá. Danielle Smith, la primera ministra de Alberta, provincia que exporta grandes cantidades de petróleo y gas a EE. UU., se ha mostrado firmemente en contra de cortar las exportaciones de energía. «Bajo ninguna circunstancia Alberta aceptará cortar las exportaciones de petróleo y gas», declaró, añadiendo que prefiere una estrategia diplomática en lugar de recurrir a amenazas.
Aunque algunos otros primeros ministros se han mantenido reservados sobre sus posturas, la mayoría reconocen que podría haber represalias si la situación se agrava. «Esperamos que solo sea una bravata», comentó el primer ministro de Terranova y Labrador, Andrew Furey. «Pero estamos preparándonos como si no lo fuera.»
Las exportaciones de productos energéticos, como petróleo, gas y electricidad, desde Canadá hacia los Estados Unidos alcanzaron aproximadamente los 170 mil millones de dólares canadienses el año pasado, lo que subraya la importancia de este comercio bilateral.
La disputa comercial entre ambos países, aunque aún no ha llegado a un punto crítico, podría tener implicaciones económicas de largo alcance para ambos, y los próximos movimientos de Ford podrían alterar las dinámicas comerciales de América del Norte.
Crédito fotográfico: Global News