Un perro aduanero de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos hizo un hallazgo inusual en el equipaje de un pasajero que regresaba de África. El viajero, proveniente de la República Democrática del Congo, había declarado que su equipaje contenía pescado seco, pero la inspección en el aeropuerto Logan de Boston reveló algo sorprendente: cuerpos muertos y deshidratados de cuatro monos momificados.
El pasajero admitió haber traído los monos a Estados Unidos para su propio consumo. Sin embargo, la carne cruda o mínimamente procesada de animales salvajes, también conocida como “carne de caza”, está prohibida en Estados Unidos debido a la amenaza de enfermedades. Julio Caravia, director del puerto local de Aduanas y Protección Fronteriza, advirtió sobre los peligros potenciales de importar carne de animales silvestres, incluido el virus del Ébola.
Aunque no se presentaron cargos, todo el equipaje fue incautado y los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos marcaron los casi 4 kilogramos (9 libras) de carne de animales silvestres para su destrucción.