El caso del Sodalicio de Vida Cristiana, institución de la iglesia Católica, en el que se denunciaron abusos sexuales y otros cometidos por sus miembros contra los jóvenes que reclutaban, ha tomado un rumbo decisivo.
El papa Francisco expulsó a 10 miembros del Sodalicio después de que una comisión de la Santa Sede realizara una investigación en Perú durante algunos meses del 2023. El resultado de esa indagación es que hubo denuncias de abusos físicos, psicológicos, sadismo, encubrimiento, prácticas sectarias, acoso, intervención de comunicaciones y hasta de mal periodismo.
Los expulsado son: Eduardo Regal Villa, ex superior general del Sodalicio, el arzobispo de Piura José Antonio Eguren, quien querelló -y después desistió- a los periodistas Pedro Salinas y Paola Ugaz en su momento cuando lanzaron el libro ‘Mitad monjes, mitad soldados’ sobre los testimonios de abusos sexuales y otros en el Sodalicio. Asímismo Alejandro Bermudez, periodista que laboraba para ACI Prensa, el portal católico.
Otros mienbros expulsados son: Rafael Alberto Ismodes, Edwin Scheuch Pool, exsuperiores regionales. Así como Humberto Carlos Del Castillo Drago, Oscar Tokumura, Daniel Cardó Soria, exformadores de los particpantes. Y los exmiembros incorporados Ricardo Trenemann Yong y Miguel Salazar Steiger, quien es además prorroector para la Persona y la Cultura Universidad Católica San Pablo (UCSP).
¿RUMBO A LA EXCOMULGACIÓN?
El caso no ha quedado solo en la expulsión de los 10 miembros sodálites sino que el papa Francisco decidirá la excomulgación o no de dos personajes cercanos al Sodalicio de Vida Cristiana. Ellos son Giuliana Caccia de la Fundación Origen y Sebastián Blanco, ambos habían denunciado a Jordi Bartolomeu, sacerdote que lideró la comisión investigadora en el Perú. Lo denunciaron ante la Nunciatura Apostólica por violación del secreto profesional.
Ante esto, la Santa Sede señala que:
«Hubo un ‘comportamiento delictivo’ por parte de los involucrados, por haber suscitado públicamente ‘el odio contra la Sede Apostólica por un acto de la función eclesiástica’, además de impedir la investigación y ‘lesionar ilegítimamente la buena fama de terceros'»
Para no ser excomulgados deberán cumplir cinco medidas:
- La obligación de retirar la denuncia ante la Fiscalía}
- La obligación de ofrecer, de manera inmediata, disculpas a la misión especial del Papa
- La obligación de ofrecer la verdad de los hechosa los medios de comunicación con los que hayan contactado
- La obligación de acreditar documentalmente ante el Nuncio Apostólico del Perú, en un término de 48 horas a partir de la notificación, el efectivo cumplimiento de estas disposiciones.
- Se prohíbe realizar en el futuro otra manifestación pública o denuncia sobre el objeto de la misión especial del Papa, en los medios de comunicación.