THE LATIN VOX (28 de febrero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
Pride Toronto, uno de los eventos más grandes de celebración de la comunidad LGBTQ+ en América del Norte, se encuentra atravesando una difícil situación tras la pérdida de tres patrocinadores importantes que decidieron retirar su apoyo económico.
Esta decisión, que afecta profundamente a uno de los festivales más emblemáticos de Canadá, está siendo vista como una consecuencia directa de las políticas implementadas por el expresidente Donald Trump en relación a los programas de Diversidad, Equidad e Inclusión (DEI, por sus siglas en inglés) en los Estados Unidos.
Kojo Modeste, director ejecutivo de Pride Toronto, explicó que los patrocinadores que también operan en el mercado estadounidense han optado por retirarse para evitar la percepción de que están apoyando los derechos LGBTQ+ en un clima político cada vez más hostil hacia estas iniciativas.
Si bien Modeste aseguró que esta pérdida de fondos no afectará la calidad o el tamaño del evento, expresó su preocupación de que este incidente pueda ser un signo de un retroceso global para la financiación de la comunidad LGBTQ+.
«Esto podría llevar a cambios significativos que representen un enorme retroceso para la comunidad LGBTQ+ a nivel mundial», advirtió Modeste, señalando que los efectos de las políticas de Trump podrían trascender las fronteras de Estados Unidos y afectar iniciativas de inclusión en otros países, incluida Canadá.
El efecto Trump cruza fronteras
El temor en Canadá es palpable. La decisión de algunos patrocinadores de alejarse de Pride Toronto refleja el impacto que la orden ejecutiva de Trump, que eliminó los programas DEI en agencias federales y empresas que trabajan con el gobierno de EE. UU., ya está teniendo en los negocios de Canadá.
A pesar de que un juez de EE. UU. bloqueó temporalmente esta prohibición, no ha detenido los despidos ni las decisiones de las empresas de alejarse de las iniciativas de diversidad.
El gobierno de Trump ha implementado una purga masiva de al menos 30,000 trabajadores federales, incluidos aquellos que trabajaban en proyectos relacionados con la diversidad. Estas iniciativas, que históricamente han sido cruciales para garantizar que las personas de color, las mujeres y la comunidad LGBTQ+ tengan acceso a oportunidades laborales, ahora están siendo desmanteladas o minimizadas.
El impacto en el mundo corporativo
En el mundo corporativo canadiense, algunas empresas ya están tomando medidas para adaptarse a la presión proveniente de EE. UU. Shopify, la plataforma de comercio electrónico con sede en Ottawa, ha retrocedido en varias iniciativas de diversidad, incluyendo la disolución de su equipo de Comercio Equitativo y un programa destinado a emprendedores indígenas. Este fenómeno ha generado preocupación entre los académicos que investigan las políticas de DEI.
Sui Sui, profesora de la Universidad Metropolitana de Toronto y experta en investigaciones sobre iniciativas DEI, explicó que algunas empresas están tomando decisiones para apaciguar a los inversores estadounidenses, buscando recortes a corto plazo en lugar de entender los beneficios a largo plazo de la diversidad en el lugar de trabajo.
Según Sui, sus investigaciones demuestran que las iniciativas de diversidad fortalecen a las empresas, aumentando la innovación, la productividad y la capacidad de adaptarse rápidamente en tiempos de crisis.
La inquietud de los académicos
Eddy Ng, profesor de la Universidad Queen’s en Ontario y especialista en equidad e inclusión en el ámbito empresarial, advirtió que el caso de Pride Toronto es solo un indicio de lo que podría ocurrir en el futuro en Canadá.
«Las corporaciones invierten en estas iniciativas no solo por motivos altruistas, sino también porque quieren ser vistas como buenos ciudadanos corporativos», comentó Ng, quien explicó que muchas empresas implementaron estos programas tras la muerte de George Floyd en 2020, un hecho que generó un despertar global en torno a la equidad racial y de género.
Ng expresó su esperanza de que las empresas canadienses no sigan la tendencia de retroceso iniciada por la administración Trump en EE.UU., ya que el mercado canadiense reconoce el valor de la diversidad para la innovación y la creatividad, aspectos clave para ganar una ventaja competitiva en el mundo actual.
Un clima de miedo y retroceso
El director de Pride Toronto subrayó que, aunque no reveló los nombres de los patrocinadores que se retiraron, el evento sigue dispuesto a trabajar con estas empresas en el futuro.
Sin embargo, la situación refleja un clima de miedo y retroceso que está siendo fomentado por las políticas de Trump. La administración estadounidense ha dejado claro que las iniciativas DEI son vistas como una amenaza en algunos sectores, lo que está teniendo un impacto real en los negocios a ambos lados de la frontera.
La pérdida de patrocinadores para Pride Toronto no es un caso aislado. A medida que los efectos de las políticas de Trump continúan propagándose, tanto en EE.UU. como en Canadá, los defensores de la diversidad, la equidad y la inclusión temen que este sea solo el comienzo de una tendencia más amplia hacia el desmantelamiento de estos programas en todo el continente.
Este episodio subraya la creciente polarización en torno a los derechos LGBTQ+ y las políticas de diversidad, un tema que seguirá siendo clave en la política y la economía global durante los próximos años.
Crédito fotográfico: Pride Toronto