El miércoles 15 de septiembre, se produjeron protestas simultáneas en varias ciudades canadienses, tanto a favor como en contra de los derechos de las personas LGBTQ2S+ (lesbianas, gais, bisexuales, transgénero, queer, dos espíritus y más).
Las protestas fueron convocadas por un grupo llamado Canadian Frontline Nurses, que se opone a las medidas sanitarias contra la COVID-19 y que también rechaza la educación sexual inclusiva y la ideología de género en las escuelas.
El grupo anunció que realizaría una “marcha del silencio” frente a los hospitales de Edmonton, Toronto, Ottawa, Vancouver y otras ciudades para expresar su descontento con el gobierno y el sistema sanitario.
Sin embargo, sus planes se vieron frustrados por la presencia de contramanifestantes que acudieron a apoyar a los trabajadores sanitarios y a defender los derechos LGBTQ2S+.
En Edmonton, la capital de la provincia de Alberta, se vivieron momentos de tensión cuando ambos bandos se encontraron frente al Hospital General Royal Alexandra. Los manifestantes anti-LGBTQ2S+ llevaban carteles con mensajes como “Detengan la mutilación de niños trans” o “Los niños no son experimentos”. Los contramanifestantes respondieron con consignas como “El amor es amor” o “No al odio”.
La policía tuvo que intervenir para separar a los grupos y evitar enfrentamientos violentos. Según la policía, hubo al menos una detención por agresión y varias multas por violar las normas de tráfico.
En Toronto, la mayor ciudad del país, la situación fue similar. Unos 200 manifestantes anti-LGBTQ2S+ se congregaron frente al Hospital General de Toronto, donde fueron recibidos por unos 300 contramanifestantes que les superaban en número. La policía también tuvo que intervenir para mantener el orden y evitar incidentes.
En Ottawa, la capital del país, la protesta anti-LGBTQ2S+ fue cancelada debido a la fuerte presencia policial y a la falta de asistencia. En cambio, los contramanifestantes celebraron una fiesta con música y baile frente al Hospital General de Ottawa.
En Vancouver, la protesta anti-LGBTQ2S+ también fue cancelada por el mismo motivo. Los contramanifestantes se reunieron frente al Hospital General de Vancouver para mostrar su apoyo a los trabajadores sanitarios y a la comunidad LGBTQ2S+.
Las protestas coincidieron con la campaña electoral para las elecciones federales del 20 de septiembre. Los principales partidos políticos condenaron las protestas anti-LGBTQ2S+ y expresaron su solidaridad con los trabajadores sanitarios y con la comunidad LGBTQ2S+.
El primer ministro Justin Trudeau, del Partido Liberal, calificó las protestas anti-LGBTQ2S+ de “vergonzosas” y dijo que su gobierno seguirá defendiendo los derechos humanos y la diversidad.
El líder opositor Erin O’Toole, del Partido Conservador, dijo que las protestas anti-LGBTQ2S+ son “inaceptables” y que su partido respeta y apoya a los trabajadores sanitarios y a la comunidad LGBTQ2S+.
El líder socialdemócrata Jagmeet Singh, del Nuevo Partido Democrático (NDP), dijo que las protestas anti-LGBTQ2S+ son “repugnantes” y que su partido luchará contra el odio y la discriminación.
El líder nacionalista Yves-François Blanchet, del Bloque Quebequés, dijo que las protestas anti-LGBTQ2S+ son “intolerables” y que su partido apoya la libertad de expresión y de orientación sexual.
La líder ecologista Annamie Paul, del Partido Verde, dijo que las protestas anti-LGBTQ2S+ son “aberrantes” y que su partido se opone al fanatismo y al extremismo.