
THE LATIN VOX (11 de noviembre de 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Una inesperada ola de solicitudes médicas está sacudiendo el sistema sanitario canadiense: más de 260 médicos de Quebec han pedido licencia para ejercer en Ontario en apenas dos semanas, tras la aprobación de la controvertida Ley 2, que reforma la manera en que los médicos son remunerados en la provincia francófona.
Según datos del Colegio de Médicos y Cirujanos de Ontario (CPSO), entre el 23 de octubre y el 10 de noviembre se recibieron 263 solicitudes de profesionales que buscan trasladarse, una cifra 13 veces superior al total de apenas 19 solicitudes registradas entre junio y octubre. Hasta el momento, 35 de ellas ya han sido aprobadas.
Más de la mitad de los solicitantes son médicos de familia, aunque también hay especialistas en pediatría, radiología, anestesiología y otras áreas. La tendencia ha generado alarma entre las autoridades de Quebec, que enfrentan una creciente escasez de personal médico, mientras Ontario —donde unos 2,5 millones de residentes carecen de médico de cabecera— recibe a los profesionales con los brazos abiertos.
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, incluso invitó públicamente a los médicos descontentos de Quebec a “llamar a una línea directa” y prometió que podrían comenzar a trabajar “muy pronto”.
Una ley que desata el malestar
La Ley 2 de Quebec, aprobada el 25 de octubre y que entrará en vigor a comienzos de 2026, vincula la remuneración de los médicos a objetivos de rendimiento, basados en la cantidad de pacientes atendidos.
Además, impone multas de hasta 500,000 dólares canadienses por día a los médicos que emprendan acciones “concertadas” para desafiar las políticas del gobierno, una disposición que muchos profesionales interpretan como una cláusula de silencio.
El doctor Trevor Hennessey, jefe del departamento de anestesiología del Centro Integrado de Salud y Servicios Sociales de Outaouais, renunció a su cargo la semana pasada y evalúa mudarse a Ontario, donde ya está certificado para ejercer. “Esta ley es el último clavo en el ataúd”, declaró a CBC Radio. “Nos culpan por los fallos del sistema, cuando no tenemos control sobre los recursos que necesitamos para atender a los pacientes”.
Hennessey criticó lo que calificó como el “efecto amordazador” de la ley: “En Ontario, al menos por ahora, todavía podemos hablar con nuestros colegas sobre la situación. En Quebec, eso podría ser considerado una acción concertada. Es una ley draconiana”.
Tensión entre provincias y sistemas saturados
Mientras tanto, el Colegio Médico de Ontario y la Asociación Médica de Ontario (OMA) expresaron solidaridad con sus colegas de Quebec, aunque advirtieron que la movilidad profesional no debe desequilibrar aún más los sistemas de salud de ambas provincias.
“La OMA apoya los esfuerzos para facilitar la movilidad de los médicos, pero esto nunca debe hacerse a costa del acceso de los pacientes o de la estabilidad del sistema de otra provincia”, dijo la organización en un comunicado.
Desde el gobierno de Quebec, el primer ministro François Legault defendió la reforma, asegurando que “no se dará marcha atrás en lo esencial”. Según su oficina, la ley busca mejorar el acceso de los pacientes a los médicos de familia y hacer más eficiente el sistema público de salud.
El ministro de Salud, Christian Dubé, evitó comentar sobre las decisiones individuales de los médicos, pero reconoció la “preocupación legítima” del personal sanitario sobre cómo cambiarán sus condiciones de trabajo y compensación. “Quebec necesita a todos sus médicos”, subrayó su oficina.
Un debate que trasciende fronteras
El éxodo de profesionales reabre un debate nacional sobre la presión estructural en los sistemas de salud provinciales. Mientras Quebec intenta aumentar la productividad médica mediante objetivos y sanciones, Ontario enfrenta sus propios desafíos de recursos y espera beneficiarse de la llegada de nuevos profesionales.
Lo que comenzó como una disputa provincial amenaza ahora con convertirse en una crisis de talento médico a nivel federal, con implicaciones políticas, éticas y humanas que podrían redefinir la práctica médica en Canadá.
En palabras del doctor Hennessey: “No se trata solo de dinero o de eficiencia. Se trata de respeto, de libertad profesional y de poder cuidar a los pacientes sin miedo”.
Fuente: CBC News.
Crédito fotográfico: Getty Images