THE LATIN VOX (09 de Noviembre del 2025).- Por Daniela Medina.
Un caso confirmado de influenza aviar altamente patógena (H5N1) en un santuario de animales en Summerland, en el interior de la Columbia Británica, ha conmocionado al equipo de voluntarios y trabajadores del lugar, que califican la situación como “una de las experiencias más desgarradoras” de su historia.
La entidad afectada es Critteraid Animal Sanctuary, que alberga decenas de animales rescatados desde patos y gallinas hasta vacas, cerdos y cabras en una propiedad de aproximadamente 10 acres.
¿Qué ha ocurrido exactamente?
- El 7 de noviembre la organización publicó en redes sociales que habían dado positivo al virus H5N1 algunos de los animales bajo su cuidado.
- El mensaje indicaba que el personal y los voluntarios estaban “devastados”, señalando que “los animales están en el centro de todo lo que hacemos, y el peso emocional de este momento es inmenso”.
- La clínica ha iniciado una respuesta coordinada con la Canadian Food Inspection Agency (CFIA), la Interior Health y profesionales veterinarios, para contener el brote, evaluar riesgos y determinar las medidas correspondientes.
- Critteraid aclaró que la situación “sigue activa y regulada”, y que no están ocultando información: su prioridad es la salud de los animales, la transparencia con la comunidad y el apoyo mutuo del equipo.
Contexto y repercusiones inmediatas
Naturaleza del santuario y población animal
Critteraid funciona en Summerland como refugio de animales rescatados que incluyen aves de granja, animales domésticos y de granja mayor. Según su página web, cuentan con más de 50 animales en distintos tipos de hábitats.
Importancia epidemiológica del H5N1
Este subtipo de influenza aviar es altamente contagioso entre aves y puede representar un riesgo para la salud animal y, en circunstancias excepcionales, para la salud humana. La aparición en un santuario multispecie agrava las posibilidades de dispersión del virus hacia fauna doméstica o silvestre.
Vínculo con otros brotes en la provincia
El brote en Critteraid ocurre poco después de que la CFIA llevara a cabo el sacrificio de cientos de avestruces en una granja cercana (Edgewood) tras confirmar influenza aviar. Esto sugiere que la zona del interior de Columbia Británica se encuentra en alerta epidemiológica elevada.
Desafíos y pasos a seguir
Medidas urgentes para el santuario:
- Contención inmediata: aislar aves sospechosas, limitar acceso al público y al personal no esencial.
- Monitoreo sanitario: realizar pruebas de laboratorio a otras aves y animales susceptibles del lugar.
- Comunicación transparente: informar a la comunidad local, donantes y entidades reguladoras sobre el desarrollo del incidente.
- Evaluación de riesgos: determinar si el brote afecta solo al santuario o existe una fuente externa de contagio (aves silvestres, transporte de aves, etc.).
Implicaciones más amplias:
- Reforzar protocolos de bioseguridad en granjas, santuarios, hogares de aves y fauna de granja en la región.
- Las autoridades sanitarias provinciales deben evaluar si se requiere establecer zonas de control, vigilancia activa o restricciones epizoóticas.
- Potencial impacto sobre exportaciones o comercio de aves en Columbia Británica, si se confirma un brote de influenza aviar de alta patogenicidad.
Impacto emocional y ético
El comunicado de Critteraid refleja no solo una alarma sanitaria, sino un profundo impacto emocional en quienes trabajan en el cuidado de los animales:
“Estamos consumidos por este horror… pedimos compasión, paciencia y comprensión. Nuestro compromiso con los animales, la transparencia y esta comunidad no ha cambiado y nunca cambiará”.
El vínculo entre las personas y los animales rescatados añade una dimensión ética difícil: el brote amenaza vidas que estaban bajo protección voluntaria, lo que genera un doble desafío sanitario y humano para el refugio.
Consecuencias a mediano plan
Lo sucedido en el santuario de Summerland es una señal clara de que la influenza aviar no es un problema circunscrito sólo a granjas comerciales, sino que puede afectar también refugios, animales rescatados y entornos que no tradicionalmente se asocian con brotes epidémicos.
Este episodio subraya la necesidad de una vigilancia constante, protocolos robustos y cooperación entre voluntarios, comunidades locales y autoridades sanitarias.
Para Critteraid, sus animales y su equipo, el camino ahora implica no solo contener el brote, sino también recuperar la confianza, sanar las heridas emocionales y asegurar que esta experiencia funcione como alerta para otros santuarios en Canadá y el mundo.
Fuente: www.ctvnews.ca
Foto: Google fotos