THE LATIN VOX (16 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
En un hecho sin precedentes reciente, siete ginecólogos obstetras (OB/GYNs) que prestaban servicios hospitalarios en el Royal Inland Hospital de Kamloops presentaron sus renuncias a sus privilegios hospitalarios debido a “preocupaciones de seguridad, carga de trabajo cambiante e incapacidad para reclutar personal”, según una carta interna del grupo médico. La medida deja al hospital y a toda la comunidad regional al borde de una crisis crítica de atención materna.
La dimisión masiva ha generado una ola de inquietud entre autoridades sanitarias, funcionarios provinciales y líderes locales, quienes advierten que la ciudad podría quedar sin servicios de obstetricia hospitalaria si no se adopta una solución inmediata.
Motivos alegados y el contexto sanitario en Kamloops
Razones citadas por los médicos
En la misiva fechada el 11 de octubre, los ginecólogos expresaron que la decisión fue motivada por “problemas de seguridad generados por el volumen cambiante de trabajo” y la imposibilidad de reclutar nuevos especialistas para sostener el servicio.
Se trata de una queja acumulada durante años: los médicos sostienen que las condiciones laborales no han sido suficientes para atraer y retener talento especializado, y que la falta de respaldo provincial fortalecería una tendencia al deterioro del servicio.
Aunque algunos de los renunciantes planean continuar con servicios ambulatorios de ginecología en la comunidad, ya no prestarían cirugías ni servicios obstétricos dentro del hospital.
Reacciones institucionales inmediatas
El vicepresidente médico de la autoridad de salud regional Interior Health, el doctor Mark Masterson, reconoció la gravedad del hecho: “Tenemos mucha preocupación ante que siete obstetras renuncien”, declaró a los medios locales.
Masterson afirmó que Royal Inland Hospital sigue operativo y que esfuerzos urgentes están en marcha para asegurar la continuidad del servicio materno. “Estamos trabajando de manera colaborativa con los especialistas, reconociendo que hay espacio para mejorar”, agregó.
El hospital y la autoridad sanitaria afirmaron que algunas facultades quirúrgicas, como cesáreas, seguirán siendo cubiertas por otros especialistas disponibles, aunque no queda claro cuánto tiempo se podrá mantener esa cobertura.
Consecuencias para la atención materna, la comunidad y la política regional
Riesgos para pacientes y familias
- Kamloops —un hospital de referencia regional podría perder su capacidad de oferta completa en salud materna hospitalaria, obligando a mujeres embarazadas a trasladarse a otras ciudades para atención de parto.
- Se estima que unas 800 mujeres nacen cada año en Kamloops, sin contar las provenientes de zonas circundantes, lo que refleja la magnitud del impacto si las maternidades locales se ven comprometidas.
- La falta de servicios hospitalarios obstétricos locales puede disuadir a familias jóvenes e influir negativamente en la atracción y retención de población en la región, algo que inquieta también a la comunidad empresarial.
Reacciones de autoridades locales y provinciales
Legisladores provinciales (MLAs) de la zona de Kamloops expresaron su alarma y urgieron al gobierno de la Columbia Británica a actuar de inmediato. Por ejemplo, Peter Milobar, MLA de Kamloops Centre, acusó al gobierno de haber ignorado por años las advertencias que los médicos hicieron sobre la saturación del sistema y la falta de apoyo.
Milobar advirtió que si no se corrige pronto la situación, dentro de 4 a 6 meses Kamloops podría quedar sin servicios especializados de salud para mujeres.
El NDP y otros críticos han perfilado esta renuncia colectiva como un síntoma del colapso progresivo de los servicios de salud especializados en Columbia Británica, donde demanda y presión operativa han venido creciendo.
Desafíos logísticos y estratégicos para Interior Health
- Reclutar ginecólogos especializados capaces de cubrir servicios hospitalarios completos resulta un reto en regiones no metropolitanas, dadas las condiciones de trabajo, incentivos y carga de responsabilidades.
- Se requiere un plan urgente para traer médicos de reemplazo (locums) mientras se restablece la plantilla permanente.
- Las condiciones de contratación, compensación, carga laboral y el apoyo institucional deberán ser revisados para prevenir una ola de renuncias adicionales.
- Garantizar que pacientes no sufran interrupciones en servicios de emergencia obstétrica es un desafío urgente.
Comparación regional y contexto más amplio
La situación en Kamloops se enmarca dentro de un fenómeno que varios hospitales y regiones de Canadá han experimentado: escasez de especialistas, aumentos de carga laboral, desgaste profesional y dificultad para reclutar en zonas remotas.
Algunos hospitales en Columbia Británica y otras provincias ya han reportado pérdidas de personal ginecológico o de otras especialidades, cierres temporales de servicios y reconfiguración de atención materna en otras áreas de salud.
La renuncia simultánea de siete ginecólogos de un hospital regional es, sin embargo, algo inusual por su magnitud y por la rapidez con que desmantela la capacidad operativa habitual de una institución.
Escenarios posibles y rutas de acción
- Restauración rápida mediante contratos temporales
Interior Health podría contratar especialistas locum (temporales) para cubrir la brecha mientras se lanza un proceso más ambicioso de reclutamiento a largo plazo. - Rediseño de la estructura de servicios regionales
Parte de los servicios obstétricos podrían redistribuirse a hospitales cercanos, con colaboración interhospitalaria para asegurar continuidad. - Iniciativas de incentivos y programas de retención
Bonos, viajes, condiciones especiales para atraer especialistas a Kamloops, mejoras salariales y apoyo administrativo podrían ser clave para que los médicos no abandonen la zona. - Transparencia, participación y monitoreo público
Que la autoridad regional comparta planes concretos, cronogramas y mecanismos de rendición fortalecería la confianza pública durante la crisis. - Presión política continua para que el gobierno provincial intervenga directamente
Legisladores y comunidades podrían exigir que Victoria (capital provincial) asuma responsabilidad mayor con financiación, políticas de retención o reestructuración del sistema de salud regional.
La dimisión masiva de siete ginecólogos en Kamloops no es un caso aislado, sino un síntoma de tensiones profundas en los sistemas de salud regionales: falta de recursos, condiciones laborales insuficientes y una zona gris administrativa que deja a las comunidades al borde del colapso en atención básica vital.
Lo que ocurre allí evidencia que el acceso a servicios esenciales como el parto y la salud de la mujer puede peligrar cuando el sistema es incapaz de sostener a sus especialistas. Kamloops enfrenta ahora no sólo una crisis médica, sino una prueba institucional: si falla la respuesta, muchas mujeres en esa región perderán la posibilidad de recibir atención cerca de casa.
Queda por verse qué tan rápido las autoridades sanitarias, provinciales y federales responderán al llamado de urgencia. El plazo es corto y las vidas están en juego.
Fuente: www.cbc.ca
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