La Inmigración, Refugiados y Ciudadanía de Canadá (IRCC) considera la reunificación familiar como un pilar fundamental de su política de inmigración. Para que un ciudadano canadiense o residente permanente pueda patrocinar a su cónyuge o pareja extranjera, el IRCC debe asegurarse de que la relación sea genuina. Esto se debe a que, en algunos casos, personas pueden intentar mantener relaciones ficticias con el objetivo de obtener el estatus de residente permanente en Canadá de manera fraudulenta.
Para demostrar que una relación es genuina, se requiere presentar varios documentos en la solicitud de patrocinio. Estos documentos varían según si la pareja está casada o en una unión de hecho en Canadá. En el caso de parejas casadas, se deben proporcionar pruebas como un certificado de matrimonio, registro del matrimonio ante una autoridad gubernamental, y pruebas de divorcio si es necesario. También se pueden incluir invitaciones y fotos de la boda.
Para parejas en una unión de hecho, se necesitan documentos similares a los de las parejas casadas, aunque sin las fotos e invitaciones de la boda. Además, se requieren pruebas de apoyo financiero mutuo y otros documentos que demuestren que la relación es reconocida por amigos o familiares. El IRCC también espera que las parejas proporcionen al menos dos conjuntos de documentos que respalden su relación conjunta, como pruebas de propiedad conjunta de bienes inmuebles, contratos de alquiler conjuntos y cuentas de servicios públicos compartidas.
En casos en los que un oficial de inmigración tenga dudas sobre la autenticidad de la relación, puede solicitar una entrevista tanto al patrocinador como al solicitante. La intención de estas evaluaciones es prevenir fraudes y asegurarse de que las relaciones sean reales y comprometidas. Por lo tanto, es fundamental que las parejas estén preparadas para proporcionar una amplia documentación que respalde la autenticidad de su relación al presentar una solicitud de patrocinio en Canadá.