Confirmada la muerte del líder del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, en un accidente aéreo en Rusia. Las autoridades rusas realizaron pruebas genéticas en los cuerpos de las 10 víctimas del accidente, que confirmaron la presencia de Prigozhin y sus lugartenientes en el avión siniestrado. El accidente ocurrió entre Moscú y San Petersburgo y había suscitado especulaciones sobre si se trataba de un ataque planeado por el Kremlin o si Prigozhin había escapado de la muerte.
Hace dos meses, Prigozhin lideró una revuelta de un día contra el ejército ruso, movilizando a sus mercenarios desde Ucrania hacia Moscú. Putin denunció este acto como «traición», pero el Kremlin llegó a un acuerdo con Prigozhin para poner fin a la revuelta. Esto generó interrogantes sobre si Prigozhin enfrentaría consecuencias por desafiar la autoridad de Putin.
Una evaluación de inteligencia de EE. UU. sugirió que una explosión intencional causó la caída del avión, lo que llevó a especulaciones sobre un posible asesinato dirigido por Putin. Sin embargo, el Kremlin rechazó estas acusaciones como una «mentira completa».
Prigozhin era el líder del Grupo Wagner, que desempeñó un papel destacado en la campaña militar de Rusia en Ucrania y operó en varios países africanos y del Medio Oriente. Después del amotinamiento, el Kremlin anunció que Prigozhin sería exiliado en Bielorrusia, y se ofrecieron opciones a sus combatientes para seguirlo, retirarse o unirse al ejército regular de Rusia y regresar a Ucrania.
El destino de Wagner ahora es incierto después de la muerte de Prigozhin y sus principales lugartenientes en el accidente aéreo. El incidente ha puesto fin a las conjeturas sobre la participación de Prigozhin y ha planteado preguntas sobre el futuro de este grupo paramilitar ruso.