Donald Trump, candidato presidencial por los conservadores, aceptó finalmente el debate con Kamala Harris, candidata demócrata que podría ser la primera presidenta en Estados Unidos, llevando por ahora una ligera ventaje de más de 3% sobre su oponente.
Trump dejaba en espera su aceptación del debate, porque no quería que fuera trasmitido por la cadena ABC, llegando incluso a decir que no debería ser parte del encuentro.
“He llegado a un acuerdo con los demócratas radicales de izquierdas para un debate con la camarada Kamala Harris. Será retransmitido en directo por ABC FAKE NEWS, con diferencia el canal más desagradable e injusto del sector”, dijo en las redes sociales.
El debate será el 10 de setiembre y ambos estarán de pie. No podrán tener apuntes o notas y lo que aún no está claro es si los micrófonos permanecerán abiertos durante todo el debate. Trump había dicho que debían apagarse cada vez que dejen de habla, pero Harris prefiere que estén operativos todo el tiempo, debido a que Trump suele seguir lanzando «dardos» aún cuando ya no tiene turno para exponer. Al parecer, se aceptaría que estén silenciados como una condición de Trump para participar del debate.