
THE LATIN VOX (10 de marzo del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
La guerra en Ucrania atraviesa uno de sus momentos más delicados, con una creciente presión internacional para encontrar una solución pacífica al conflicto.
En ese contexto, el secretario de Estado de EE. UU., Marco Rubio, llegó a Arabia Saudita para participar en reuniones de alto nivel que buscarán reparar las relaciones entre Washington y Kiev, afectadas por las políticas de la administración Trump.
Rubio destacó que no existe una «solución militar» al conflicto y que ambos bandos deberán ceder si quieren avanzar hacia la paz.
La delegación ucraniana, encabezada por el jefe de gabinete de Volodymyr Zelensky, Andriy Yermak, se reunirá con Rubio y otros funcionarios de alto rango de la Casa Blanca en Jeddah, Arabia Saudita, un terreno neutral para ambas partes.
Las conversaciones serán las primeras oficiales entre los dos gobiernos desde el tenso encuentro entre Zelensky y Donald Trump en la Casa Blanca, donde las tensiones llevaron a la suspensión de la crucial ayuda militar estadounidense a Ucrania.
Un nuevo enfoque de paz, pero con desafíos
En declaraciones a la prensa, Rubio subrayó la necesidad de evaluar la disposición de Ucrania para hacer concesiones a fin de alcanzar un acuerdo de paz.
Según el funcionario estadounidense, «la cosa más importante que debemos lograr en estas reuniones es un fuerte sentido de que Ucrania está preparada para hacer cosas difíciles, al igual que lo tendrán que hacer los rusos, para terminar con este conflicto o al menos pausarlo de alguna manera».
Rubio también afirmó que «no hay solución militar para esta situación» y destacó que, aunque Rusia no podrá conquistar toda Ucrania, tampoco será posible que Ucrania logre recuperar todo el territorio ocupado por Rusia desde 2014 en un período razonable.
La presión rusa y las negociaciones internacionales
En la víspera de las reuniones, Rusia intensificó sus ataques con una serie de bombardeos sobre Kiev y otras ciudades ucranianas, mientras intentaba rodear a miles de soldados ucranianos en la región rusa de Kursk.
La situación de los combatientes ucranianos se complica cada vez más con la presión militar rusa, que se siente empoderada tras la falta de apoyo estadounidense efectivo debido a las tensiones políticas entre Kiev y Washington.
El presidente Zelensky, que ya se encontraba en Arabia Saudita para reunirse con el príncipe heredero Mohammed bin Salman, expresó su esperanza de que las negociaciones en Jeddah produzcan resultados concretos para poner fin a la guerra.
En su cuenta de X, Zelensky aseguró que Ucrania está «plenamente comprometida con un diálogo constructivo» y que se encuentran sobre la mesa «propuestas realistas». «Lo clave es actuar rápido y de manera efectiva», afirmó.
El papel de los minerales y la relación con Trump
Una parte crucial de las conversaciones será el acuerdo de minerales que Ucrania podría firmar con Estados Unidos. La administración Trump, según informaciones de medios estadounidenses, está condicionando la reanudación de la ayuda militar y el intercambio de inteligencia con Ucrania a este acuerdo. Sin embargo, Rubio indicó que aún hay detalles por definir sobre este acuerdo.
A pesar de que Zelensky está dispuesto a negociar un pacto sobre los recursos minerales de Ucrania, las condiciones para el retorno del apoyo militar estadounidense siguen siendo inciertas. En cuanto a la política interna de Ucrania, también se especula que Trump podría exigir concesiones territoriales a Ucrania o incluso que Zelensky dimita como parte de un acuerdo para reactivar la ayuda.
La perspectiva de Europa y la incertidumbre internacional
A medida que las relaciones con Estados Unidos se vuelven más complicadas, Zelensky ha centrado sus esfuerzos en asegurar el apoyo europeo, aunque las expectativas de una resolución rápida se ven opacadas por la incertidumbre sobre el futuro político de Ucrania.
La situación es aún más tensa debido a las declaraciones de Trump, quien sugirió recientemente que Ucrania podría no sobrevivir a largo plazo, incluso con el apoyo de EE. UU.
El Reino Unido también está involucrado en los esfuerzos diplomáticos, con el primer ministro británico, Keir Starmer, expresando su esperanza de que las conversaciones en Arabia Saudita conduzcan a una reanudación de la ayuda estadounidense a Ucrania.
Sin embargo, la realidad es que las diferencias entre Zelensky y la administración Trump siguen siendo profundas, y la posibilidad de una solución rápida parece distante.
¿Un camino hacia la paz o más conflictos?
Las conversaciones en Jeddah representan una oportunidad para que las potencias internacionales encaminen a Ucrania hacia una resolución pacífica del conflicto. Sin embargo, el camino está lleno de obstáculos. Con Rusia no mostrando interés en un alto al fuego y las divisiones dentro de las principales potencias involucradas, la guerra sigue siendo un conflicto sin fin a la vista.
Lo cierto es que, como destacó Rubio, «no hay solución militar», pero las concesiones y el compromiso de ambas partes serán clave para determinar si finalmente se puede encontrar una salida a este conflicto devastador que sigue afectando no solo a Ucrania, sino a todo el orden internacional.
Crédito fotográfico: Saul Loeb/AFP/Getty Images