
THE LATIN VOX (01 de Noviembre del 2025).- Por Daniela Medina.
Un equipo de geocientíficos liderado por Colleen A. Dalton ha publicado un estudio en la plataforma de la American Geophysical Union (AGU) que sugiere una hipótesis sorprendente: entre hace 15 y 6 millones de años, una reducción en la expansión del fondo oceánico pudo haber provocado que los océanos se hundieran, provocando una caída del nivel del mar estimada entre 26 y 32 metros.
Este trabajo plantea que no sólo los hielos terrestres y la expansión térmica del agua influyen en el nivel del mar, sino que los procesos tectónicos y la dinámica de la corteza oceánica también jugaron un papel central a escala global. Si esta hipótesis se consolida, puede cambiar la manera en que comprendemos los cambios de nivel del mar en el pasado y sus implicaciones para el futuro.
¿Qué es lo que propone el estudio?
Según Dalton y sus colegas, el mecanismo sería el siguiente:
- Durante el periodo entre hace 15 y 6 millones de años durante el Mioceno medio al Plioceno se detectó una reducción del ~35 % en la producción de corteza oceánica nueva en las dorsales oceánicas.
- Esta menor producción implicó que menos material magmático emergiera y que la corteza oceánica más antigua continuara adentrándose hacia las zonas de subducción, lo que provocó un hundimiento gradual de las cuencas oceánicas. Como resultado, los océanos en su conjunto ganaron volumen interno pero perdieron altura del nivel del mar.
- El estudio calcula que este hundimiento de las cuencas oceánicas es decir, que el “suelo” del océano bajara habría desplazado entre 26 y 32 metros de agua globalmente, produciendo una caída significativa del nivel del mar.
- Se añade un componente relacionado con el flujo de calor: la disipación de calor desde el manto terrestre hacia el océano disminuyó en torno al 8 %-35 % en ciertos segmentos, lo que habría afectado la termodinámica de las cuencas y reforzado el hundimiento.
¿Por qué es importante este hallazgo?
Este descubrimiento tiene implicaciones profundas sobre varias dimensiones de las ciencias de la Tierra:
- Revisión del paradigma del nivel del mar: Tradicionalmente se asume que el nivel del mar sube o baja principalmente por el derretimiento de hielos y la expansión térmica del agua. Este estudio introduce la idea de que la geodinámica de la litosfera oceánica también puede provocar variaciones del nivel del mar a gran escala.
- Contexto paleo-oceánico: En el registro geológico, se identifican regresiones marinas (disminución del mar) que hasta ahora se atribuían en su mayoría a cambios glaciares o sedimentarios. Este análisis añade una nueva causa tectónica que puede explicar parte de esas regresiones antiguas.
- Implicaciones para los modelos futuros: En un mundo que anticipa subida del nivel del mar por cambio climático, entender los procesos de hundimiento o elevación del suelo oceánico se volverá esencial para predecir mejor la variabilidad del nivel del mar.
- Interdisciplinariedad: El estudio combina geodinámica, geoquímica, paleoclimatología y oceanografía, lo que abre nuevas rutas de investigación sobre cómo interactúa la Tierra sólida con la hidrosfera.
Reacciones y cautelas científicas
Aunque el estudio es ambicioso, la comunidad científica ha reaccionado con interés pero también con cautela:
- Se reconoce que la producción de corteza oceánica puede influir en el volumen de las cuencas y, por tanto, en el nivel relativo del mar, pero cuantificar ese efecto con exactitud es complejo.
- Algunos expertos señalan que otros factores como cambios en los hielos terrestres, variaciones en el volumen de agua continental, movimiento isostático pueden estar interrelacionados con el mecanismo propuesto.
- El estudio pide más datos de batimetría, morfología del fondo oceánico y fichas térmicas para confirmar totalmente el modelo.
¿Y qué expectativas hay hacia el futuro?
El estudio abre varias líneas de investigación a mediano y largo plazo:
- Estudiar otras épocas geológicas donde se sospechen caídas del nivel del mar para ver si el mecanismo de corteza oceánica puede explicar partes del fenómeno.
- Integrar estos procesos tectónicos en los modelos de cambio del nivel del mar, de modo que la predicción futura considere no solo hielo y temperatura, sino también la dinámica del fondo oceánico.
- Realizar campañas de muestreo en dorsales oceánicas, estudiar el flujo térmico del manto y la tasa de subducción para cuantificar mejor el hundimiento de cuencas oceánicas.
- Evaluar cómo las variaciones tectónicas interactúan con las condiciones climáticas por ejemplo, un cambio tectónico que produce hundimiento junto con una fase de enfriamiento glacial podría generar descensos más abruptos del nivel del mar.
El planteamiento de que una reducción en la expansión del fondo oceánico pudo haber provocado una caída del nivel del mar de hasta 30 metros entre hace 15 y 6 millones de años representa un cambio de paradigma en la forma de pensar sobre el nivel del mar. Más allá de hielo que se funde o agua que se expande, el “suelo” del océano también se mueve y ese movimiento puede tener consecuencias globales.
Aunque el modelo aún requiere validación adicional, marca un paso audaz hacia una visión más completa del sistema Tierra-Océano. Y en una era en que anticipamos la subida del mar, entender sus variaciones en el pasado incluyendo descensos tan dramáticos puede ayudar a prepararnos mejor para el futuro.
La ciencia de la Tierra, en sus profundidades abismales y costeras, sigue revelando que la historia del mar no está escrita únicamente en la superficie.
Fuente: evidencenetwork.ca
Foto: Google fotos