Vancouver está modernizando y simplificando su sistema de licencias empresariales, que cuenta con casi 600 tipos de licencias diferentes, mucho más que otras municipalidades en Columbia Británica o en Canadá. La ciudad planea reducir el número de tipos de licencias de 570 a 88, eliminando ciertas categorías de licencias, como los servicios de corresponsales, discotecas para adolescentes y clasificaciones específicas para psíquicos y adivinadores. La actualización también busca eliminar leyes arcaicas dirigidas a la «inmoralidad e indecencia» en los establecimientos de pinball.
La Licencia de Negocios es una función importante del Ayuntamiento, y todas las empresas que operan en la ciudad necesitan obtener una licencia municipal. El año pasado, la ciudad emitió casi 53,000 licencias de negocio, generando $20.6 millones en ingresos por tarifas de licencia. Sin embargo, el sistema actual se ha vuelto complicado y confuso debido a los cambios incrementales realizados a lo largo de los años y al lenguaje anticuado incluido en la Ley de Licencias, aprobada en 1969.
El personal de la ciudad sugiere combinar siete clasificaciones diferentes para plomeros y contratistas de gas en una sola licencia de «contratista de comercio», mientras que otros 27 tipos de clasificación para contratistas generales serán combinados en una sola licencia de «contratista general». Los psíquicos y adivinadores ya no tendrán su propia clasificación, sino que se combinarán con servicios de recados, decoración, compras, servicios funerarios y capillas de bodas en la categoría de «servicios personales».
La revisión de la licencia empresarial forma parte del proyecto de revisión de licencias comerciales de varias fases del personal de la ciudad para modernizar y actualizar las leyes de licencias de la ciudad. Las fases futuras se centrarán en la modernización de las regulaciones de licencias comerciales y la actualización de partes anticuadas de la Ley de Licencias.
Aunque la revisión de licencias comerciales reducirá los tiempos de procesamiento y los retrasos en las solicitudes de licencias, la comunidad empresarial de Vancouver se preocupa por un posible aumento en las tarifas de licencia. La organización que representa a las empresas independientes, LOCO B.C., teme que los aumentos de las tarifas lleguen en un momento en el que los aumentos de impuestos a la propiedad, los salarios mínimos, los impuestos de salud del empleador, las nuevas vacaciones pagadas y la inflación ya estén desafiando la viabilidad de las pequeñas empresas.