La ciudad de Vancouver ha inaugurado un nuevo cuartel de bomberos que se destaca por ser el primero en Canadá que tiene una huella de carbono neta cero. Se trata del Fire Hall No. 17, ubicado en el barrio de Kerrisdale, que reemplaza al antiguo edificio que databa de 1955 y que estaba en malas condiciones.
El nuevo cuartel de bomberos tiene una serie de características que lo hacen más eficiente y sostenible, como por ejemplo:
- Un sistema geotérmico que utiliza el calor del subsuelo para calentar y enfriar el edificio.
- Paneles solares fotovoltaicos que generan electricidad para el funcionamiento del edificio y para cargar los vehículos eléctricos.
- Un sistema de recolección y reutilización de agua de lluvia para el riego y la limpieza.
- Un diseño arquitectónico que maximiza la iluminación natural y la ventilación cruzada.
- Materiales de construcción de bajo impacto ambiental, como madera certificada, hormigón reciclado y acero local.
- Un espacio verde en la azotea que mejora la biodiversidad y la calidad del aire.
El alcalde de Vancouver, Kennedy Stewart, expresó su orgullo por el nuevo cuartel de bomberos, que calificó como un ejemplo de innovación y liderazgo en la lucha contra el cambio climático. “Este es un hito importante en nuestro camino hacia convertirnos en una ciudad de cero emisiones para 2050”, dijo.
Por su parte, el jefe de bomberos, Darrell Reid, destacó los beneficios que el nuevo edificio tiene para la salud y el bienestar de los bomberos y las bomberas, así como para la seguridad y el servicio a la comunidad. “Este es un lugar donde nuestros bomberos pueden entrenar, descansar y recuperarse, y donde pueden responder rápidamente a las emergencias”, afirmó.
Los bomberos y las bomberas que trabajan en el nuevo cuartel de bomberos también se mostraron satisfechos con las instalaciones, que consideran más cómodas, modernas y funcionales que las anteriores. “Ese otro edificio realmente apesta”, dijo uno de ellos. “Este es mucho mejor”, agregó.
El costo total del proyecto fue de $32 millones, financiados por la ciudad de Vancouver y el gobierno federal. El nuevo cuartel de bomberos tiene una capacidad para albergar a 16 bomberos y cuenta con cuatro camiones, incluyendo uno eléctrico.
El nuevo cuartel de bomberos forma parte del plan de acción climática de Vancouver, que busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 50% para 2030 y alcanzar la neutralidad carbónica para 2050. La ciudad también tiene previsto construir otros dos cuarteles de bomberos con estándares similares al Fire Hall No. 17 en los próximos años.