THE LATIN VOX (10 de enero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
La líder de la oposición venezolana, María Corina Machado, fue presuntamente secuestrada por funcionarios del régimen de Nicolás Maduro en las calles de Caracas, tras haber salido de su escondite para liderar una manifestación contra el presidente autoritario.
Según sus allegados, Machado fue interceptada de forma violenta por las fuerzas del régimen después de participar en una protesta en la capital, la cual se llevó a cabo en rechazo a la toma de posesión de Maduro para su tercer mandato presidencial.
Un secuestro y una protesta histórica
El jueves, Machado se unió a miles de opositores que se manifestaron en varias ciudades de Venezuela, exigiendo que se reconociera al candidato opositor Edmundo González como el verdadero ganador de las elecciones presidenciales de 2024. A pesar de las acusaciones de fraude y de la falta de pruebas presentadas por Maduro sobre su victoria, el líder chavista se prepara para juramentarse el viernes.
Machado, quien había permanecido oculta desde los resultados de las elecciones del 28 de julio para evitar su captura, reapareció en la tarde del jueves en pleno centro de Caracas. Con determinación, se subió a un camión y comenzó a encabezar la protesta, alzando la voz en un discurso que inspiró a la multitud a corear: «¡No tenemos miedo!»
Sin embargo, al finalizar su intervención, Machado fue «violentamente interceptada», según el comunicado de sus representantes. Se informó que las fuerzas del régimen abrieron fuego contra las motocicletas que transportaban a la líder opositora. Machado fue retirada de manera forzosa y obligada a grabar varios videos, según denunciaron sus aliados.
Reacciones internacionales y condena global
La noticia del supuesto secuestro de Machado causó una ola de condenas a nivel internacional. La presidenta de Panamá, José Raúl Mulino, y el ex presidente de Colombia, Iván Duque, expresaron su preocupación por la seguridad de la opositora y acusaron a Maduro de actos de «vilencia». España y Argentina también manifestaron su condena a lo que consideraron un «ataque criminal» por parte del régimen chavista.
Por su parte, Edmundo González, el exiliado candidato opositor que, según las cifras de la oposición, habría sido el verdadero ganador de las elecciones de 2024, exigió la liberación inmediata de Machado, calificando el hecho como un secuestro realizado por las fuerzas de seguridad venezolanas.
La reacción de las fuerzas de seguridad frente a la protesta de Machado fue tensa, y se produjeron al menos 17 arrestos durante las manifestaciones en todo el país. Según el analista Phil Gunson, el hecho de que Maduro no hubiera arrestado a Machado antes se debió a una estrategia calculada: «Machado es un irritante para el régimen, pero arrestarla podría hacerla aún más popular. Hoy, sin embargo, ella logró ponerlos en evidencia».
Un régimen en pleno control, pero bajo tensión
Carlos Lizarralde, autor de «El colapso de Venezuela», sugirió que la detención de Machado podría ser una señal de que el régimen de Maduro siente que su control sobre las fuerzas de seguridad y el aparato represivo está firme.
«La estrategia de Maduro ha sido crear un clima de terror, neutralizar cualquier red de oposición y consolidar su poder dentro de las instituciones militares y policiales», dijo Lizarralde, refiriéndose a las medidas represivas que han llevado a cientos de opositores a prisión en los últimos meses.
Machado, por su parte, se pronunció después de ser liberada, asegurando que se encontraba en un «lugar seguro» y reafirmando su compromiso con la lucha opositora. En un mensaje publicado en redes sociales, expresó su agradecimiento por el apoyo de los manifestantes y señaló que la represión del régimen no frenaría su determinación: «Estoy más decidida que nunca a seguir a su lado HASTA EL FINAL», dijo.
¿Un giro en la tensión política de Venezuela?
Mientras tanto, la situación política en Venezuela sigue siendo extremadamente tensa. El 2024 parece ser un año de confrontación entre un régimen que se aferra al poder con cada vez más medidas represivas y una oposición decidida a desafiar su legitimidad. Los últimos eventos sugieren que, si bien Maduro parece tener el control militar y policial, la resistencia de figuras como María Corina Machado sigue siendo una amenaza constante, tanto dentro de Venezuela como en el ámbito internacional.
En medio de estos enfrentamientos, la comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos, con la esperanza de que la voluntad del pueblo venezolano, representada por líderes como Machado, pueda finalmente prevalecer. Sin embargo, la pregunta sigue siendo: ¿será suficiente la presión externa para cambiar el rumbo de un régimen que parece más decidido que nunca a mantenerse en el poder?
Crédito fotográfico: Juan Barreto/AFP/Getty Images