El gobierno canadiense convocó al embajador chino el jueves pasado, luego de las acusaciones de que Beijing había apuntado al diputado conservador Michael Chong. El ministro de Asuntos Exteriores, Melanie Joly, dijo que abordar el tema con el embajador Cong Peiwu es el primer paso de un proceso cuidadoso. Mientras tanto, la oposición pedía la expulsión de un diplomático chino en Toronto, acusado de realizar «operaciones de intimidación» contra Chong y su familia en Hong Kong. Las tensiones han estado aumentando en Ottawa, mientras que el Globe and Mail ha publicado nuevas revelaciones sobre el alcance de estas acusaciones.
El primer ministro Justin Trudeau y el ministro de Seguridad Pública Marco Mendicino finalmente admitieron el miércoles que solo se enteraron de los detalles de las acusaciones cuando el Globe and Mail las publicó. Trudeau dijo que el Servicio Canadiense de Inteligencia y Seguridad (CSIS) determinó que la información no cumplía con un umbral para «enviarla o sacarla del CSIS», o dar más que lo que se describió como una «sesión informativa defensiva» a Chong en ese momento. Chong dijo que solo se enteró de los detalles de que él y otros diputados eran objetivos esta semana.
La convocatoria del embajador refleja la gravedad de las acusaciones. Sin embargo, Canadá ha aprendido de experiencias previas que China se retaliará, por lo que los intereses económicos y diplomáticos de Canadá deben considerarse cuidadosamente. Chong llamó a la expulsión inmediata del diplomático chino en el centro de las acusaciones, diciendo que si no se toma esa medida, se estará enviando un mensaje a los estados autoritarios de todo el mundo que dice que Canadá está abierta a la interferencia extranjera.
El jueves, China negó las acusaciones y dijo que no interfiere en la política interna de otros países. En Ottawa, las tensiones aumentaron y los ánimos se calentaron cuando dos diputados liberales afirmaron que, a diferencia de lo que Chong había dicho, en realidad había sabido de los detalles de las acusaciones durante dos años. Los diputados conservadores acusaron a los liberales de difundir información errónea y fueron interrumpidos por el presidente por usar un lenguaje considerado no parlamentario. Los diputados liberales más tarde se disculparon y dijeron que no habían querido decir que Chong conocía los detalles específicos de las acusaciones que salieron a la luz esta semana.