El líder conservador federal, Pierre Poilievre, está lanzando una campaña publicitaria valorada en más de $3 millones para mejorar su imagen y construir confianza entre los votantes canadienses. La campaña incluye anuncios que buscan presentar a Poilievre como el líder capaz de «arreglar» un Canadá que se percibe como «roto».
Estos anuncios buscan establecer una imagen más positiva de Poilievre, cuya impresión negativa entre los votantes ha sido relativamente alta para un líder de la oposición. El partido también espera atraer a un grupo demográfico clave: las mujeres, especialmente aquellas mayores de 50 años, que han mostrado un apoyo continuo a los Liberales.
El objetivo de la campaña es presentar a Poilievre como un líder en quien los votantes pueden confiar y que tiene la capacidad de resolver los problemas que aquejan a Canadá. A través de anuncios cuidadosamente diseñados y mensajes de su esposa, Anaida Poilievre, el partido busca cambiar la percepción negativa y resaltar la motivación y las cualidades personales de Poilievre. Además, el partido espera aprovechar esta campaña para contrarrestar los ataques que el primer ministro Justin Trudeau ha lanzado contra Poilievre, acusándolo de fomentar la ira y la división en el país.
Se ha observado un enfoque en el segmento femenino de votantes, ya que las mujeres, especialmente las mayores, han tendido a favorecer a los partidos de la competencia, como los Liberales y el NDP. Los Conservadores esperan que, al suavizar el tono y centrarse en cuestiones económicas que afectan directamente a las familias, puedan atraer a más mujeres a su causa. Poilievre también ha estado comprometido en cortejar a diversas comunidades étnicas y ha sido visto en eventos con miembros de la comunidad hispana. Con estas estrategias, los Conservadores buscan mejorar la imagen de Poilievre y ampliar su base de apoyo de cara a las próximas elecciones.