Una mujer de Dorval, Quebec, relató una lucha de 14 meses con Air Canada por un reembolso de alrededor de mil dólares relacionado con un viaje planeado a Disney World en Orlando, Florida. El viaje se desmoronó días antes de la partida debido a la cancelación del vuelo de regreso por parte de Air Canada. A pesar de haberles ofrecido un nuevo vuelo, la alternativa no se ajustaba a su itinerario, por lo que pidieron volver al vuelo original.
Air Canada les dio dos opciones: aceptar el nuevo vuelo o cancelar el viaje. La mujer eligió la segunda opción y preguntó si recibiría un crédito por ello. La aerolínea aseguró que trabajarían con ella, pero catorce meses después, todavía no había recibido ningún reembolso. Durante ese tiempo, pasó horas en espera en el teléfono, lo que resultó en una experiencia extremadamente frustrante.
Finalmente, después de una larga espera y la correspondiente frustración, Air Canada acordó emitir un crédito de $929.63 como un gesto de buena voluntad. A pesar de esto, la mujer expresó su descontento con la respuesta de la aerolínea, argumentando que un gesto de buena voluntad debería haber incluido más que simplemente recuperar su dinero. Además, señaló que su intención nunca fue cancelar el viaje, sino crear recuerdos con sus nietos.
John Gradek, coordinador del Programa de Gestión de Aviación de la Universidad McGill, afirmó que Monzione tenía derecho a desafiar a la aerolínea y destacó que obtener reembolsos de las aerolíneas es conocido por ser complicado. Gradek sugirió que las personas consideren la compra de un seguro de cancelación completo antes de volar para protegerse en casos similares.