Un hombre que estaba oficiando una boda en Texas disparó accidentalmente su arma y le causó una herida leve a su nieto de tres años, pero el evento no se canceló y la ceremonia siguió adelante. El hecho ocurrió el sábado por la noche en la ciudad de Waxahachie, al sur de Dallas, según informó la policía local.
El hombre, identificado como Ricky Carter, de 64 años, estaba guardando su pistola en el bolsillo trasero de su pantalón cuando se le escapó un tiro. La bala rozó la pierna de su nieto, que estaba cerca de él, y luego impactó en el suelo. El niño fue trasladado al hospital con una herida superficial y fue dado de alta al poco tiempo.
La policía dijo que Carter tenía permiso para portar armas y que no enfrentará cargos criminales por el incidente. Sin embargo, se le confiscó el arma y se le advirtió sobre las medidas de seguridad que debe tomar al manejarla.
El portavoz de la policía, Sgt. Marcus Brown, dijo que la boda no se interrumpió por el disparo y que los novios y los invitados decidieron continuar con la celebración. “Fue una situación muy extraña”, dijo Brown. “No sé cómo pudieron seguir con la boda después de eso, pero supongo que estaban muy emocionados”.