El presidente del Senado de Canadá, Noël Kinsella, ha decidido no asistir a una reunión del G20 en Nueva Delhi, en protesta por la muerte de un ciudadano canadiense en la India. El canadiense era Jaspal Atwal, un ex miembro del grupo separatista sij Babbar Khalsa, que fue asesinado a tiros por la policía india el pasado 6 de octubre.
Kinsella dijo que su ausencia era una forma de expresar su “profunda preocupación” por el caso de Atwal, al que calificó de “víctima de violaciones de los derechos humanos” por parte de las autoridades indias. Según Kinsella, Atwal había sido torturado y encarcelado sin un juicio justo durante años, y su muerte fue una “ejecución extrajudicial”.
La decisión de Kinsella ha provocado una reacción negativa por parte de la India, que ha acusado a Canadá de interferir en sus asuntos internos y de apoyar a los grupos terroristas. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de la India, Vikas Swarup, dijo que la postura de Kinsella era “inaceptable” y que el G20 era una plataforma para discutir temas globales, no bilaterales.
El caso de Atwal ha tensado las relaciones entre Canadá y la India, que ya estaban afectadas por el apoyo de algunos políticos canadienses a la causa sij. Atwal fue condenado en 1987 por intentar asesinar al ministro del Interior indio Malkiat Singh Sidhu durante una visita a Canadá. Atwal fue puesto en libertad condicional en 1992 y se le concedió la ciudadanía canadiense en 2003.