El gobierno de Ontario, liderado por el primer ministro Doug Ford, anunció el lunes que revertirá la expansión de los límites urbanos que había ordenado en noviembre de 2022, y que había generado críticas por afectar a las tierras protegidas del Cinturón Verde.
La expansión de los límites urbanos implicaba cambiar el uso de unas 3.000 hectáreas de tierras agrícolas y naturales, que pasarían a ser consideradas como urbanas, lo que permitiría su desarrollo para la construcción de viviendas y negocios.
El gobierno de Ford había justificado la medida como una forma de aumentar la oferta de vivienda y reducir los precios en el mercado inmobiliario, que se ha disparado en los últimos años en Ontario. Sin embargo, la medida fue cuestionada por los ambientalistas, los agricultores, los municipios y la oposición, que la consideraron innecesaria, dañina y arbitraria.
Según un informe del auditor general de Ontario, la decisión de expandir los límites urbanos se tomó sin consultar a los expertos, sin evaluar el impacto ambiental y sin seguir los criterios establecidos por el propio gobierno. El informe también reveló que la decisión beneficiaba a algunos promotores inmobiliarios con vínculos con el gobierno.
Ante la presión pública y el escándalo, el gobierno de Ford anunció que presentará un proyecto de ley para revertir la expansión de los límites urbanos y restaurar el uso original de las tierras afectadas. El ministro de Asuntos Municipales, Paul Calandra, dijo que el gobierno reconoce que cometió un error y que quiere corregirlo.
El Cinturón Verde de Ontario es una zona de más de 800.000 hectáreas que rodea el área metropolitana de Toronto y que alberga una gran diversidad de ecosistemas, especies y recursos hídricos. El Cinturón Verde fue creado en 2005 por el gobierno anterior para proteger las tierras agrícolas y naturales de la expansión urbana y el desarrollo industrial.