El primer ministro de Quebec, François Legault, afirmó el lunes que las negociaciones con los maestros en huelga van “muy bien” y que espera que las clases puedan reanudarse el próximo lunes.
Legault hizo estas declaraciones tras reunirse con el presidente de la Federación Autónoma de la Enseñanza (FAE), Sylvain Mallette, que representa a unos 49.000 maestros de la educación primaria y secundaria.
La FAE es uno de los dos sindicatos de maestros que iniciaron una huelga el lunes, afectando a más de 500.000 estudiantes en todo el territorio. El otro sindicato es la Federación de Sindicatos de la Enseñanza (FSE), que agrupa a unos 65.000 maestros.
Los maestros reclaman mejores condiciones de trabajo, más recursos para la educación especial, una reducción del número de alumnos por clase y un aumento salarial acorde con la inflación.
Legault dijo que el gobierno está dispuesto a ofrecer más dinero a los maestros, pero que también espera “flexibilidad” de su parte. Según Legault, el gobierno quiere que los maestros acepten trabajar más horas y que se les evalúe su desempeño.
Sin embargo, los sindicatos de maestros no comparten el optimismo de Legault y dicen que las negociaciones están estancadas. Mallette dijo que el gobierno no ha presentado ninguna propuesta concreta y que solo ha hecho “declaraciones de intenciones”. Por su parte, la presidenta de la FSE, Josée Scalabrini, dijo que el gobierno no ha respondido a las demandas de los maestros y que solo busca imponer sus condiciones.
Los sindicatos de maestros han convocado una huelga ilimitada que podría extenderse hasta el final del año escolar, si no se llega a un acuerdo con el gobierno. El gobierno, por su parte, ha dicho que hará todo lo posible para evitar que los estudiantes pierdan el año y que se respete el derecho a la educación.