El 24 de septiembre de 2022, la Municipalidad Regional de Cape Breton, en Nueva Escocia, Canadá, enfrentó una situación crítica cuando una poderosa tormenta de nieve azotó la isla. La tormenta, bautizada como Fiona, causó estragos al hacer su entrada en tierra entre Canso y Guysborough en Nova Scotia alrededor de las 4 a.m.. Los fuertes vientos, las intensas nevadas y las bajas temperaturas dejaron a gran parte de la región paralizada.
Los efectos devastadores de la tormenta incluyeron apagones generalizados, afectando a más de 335,000 clientes de Nova Scotia Power que quedaron sin electricidad . Las autoridades se vieron obligadas a declarar el estado de emergencia para garantizar la seguridad de los residentes y coordinar los esfuerzos de respuesta. Equipos de emergencia trabajaron incansablemente para restaurar los servicios, despejar carreteras bloqueadas y brindar asistencia a quienes lo necesitaban.
La comunidad de Cape Breton demostró resiliencia y solidaridad, apoyándose mutuamente durante este desafío climático. La tormenta Fiona sirvió como un recordatorio de la importancia de la preparación para desastres naturales y la colaboración en momentos de crisis.