Un equipo de rescatistas ha reafirmado su compromiso de no rendirse en el intento de salvar a una cría de orca varada cerca de la costa de la Isla de Vancouver, después de que el primer intento de rescate fracasara el viernes pasado. La joven orca, conocida como Kwiisahi?is o “Cazador Valiente”, quedó atrapada en un estuario desde el 23 de marzo, cuando su madre murió en un banco de arena.
Desde el amanecer del viernes, miembros de la Primera Nación Ehattesaht, el Departamento de Pesca y Océanos de Canadá y el Acuario de Vancouver estuvieron presentes en la laguna cerca de Zeballos, B.C., listos para actuar. El plan consistía en colocar a la orca de dos años en una gran eslinga de tela y transportarla en un vehículo especial hasta aguas abiertas. Sin embargo, la orca eludió la captura.
Paul Cottrell, del Departamento de Pesca y Océanos de Canadá, expresó: “Pudimos acercarla bastante, pero ella está empezando a entender nuestras intenciones, por lo que es probable que nuestro enfoque actual no funcione”. Ahora, el equipo no tiene más opción que buscar alternativas.
El equipo ha intentado atraer a la cría hacia el mar utilizando grabaciones de llamadas de orcas y tratando de guiarla con botes, además de usar tubos metálicos que generan un ruido fuerte al golpearlos bajo el agua. La captura y liberación era el último recurso, y ahora deben considerar otras opciones.
Cottrell añadió: “Vamos a planificar en los próximos días el siguiente paso y mirar diferentes opciones”. A pesar de los desafíos, la cría parece estar activa y saludable, y mientras ella no se rinda, el equipo de rescate tampoco lo hará. “No vamos a detenernos”, aseguró Cottrell. “Vamos a seguir adelante. Somos optimistas de que podemos hacer que esto funcione”.