El gobierno de Canadá ha rechazado la solicitud de Toronto para despenalizar la posesión de pequeñas cantidades de drogas duras en la ciudad. La decisión se tomó debido a preocupaciones sobre la seguridad pública y la falta de apoyo político. Toronto había hecho la solicitud inicialmente en 2022 como parte de un esfuerzo por abordar la crisis de muertes por sobredosis que enfrenta la ciudad.
La Ministra de Salud Mental y Adicciones, Ya’ara Saks, rechazó la solicitud, argumentando que “no protege adecuadamente la salud pública ni mantiene la seguridad pública”, según declaraciones de Health Canada. La agencia de salud pública también expresó su preocupación por “la falta de apoyo de actores clave, incluida la provincia de Ontario”.
El rechazo de la propuesta de Toronto se produce después de que la provincia de Columbia Británica (BC) retrocediera en su propia política de despenalización el mes pasado. El programa piloto de BC, que comenzó en enero de 2023 y se suponía que duraría hasta 2026, permitía a los adultos poseer hasta 2.5 gramos de heroína, fentanilo, cocaína o metanfetamina sin ser arrestados, acusados o que les confiscaran las drogas, excepto en las zonas cercanas a escuelas y aeropuertos.