Un estudio reciente sugiere que los suplementos de aceite de pescado podrían aumentar el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular y problemas cardíacos en personas sanas. La investigación, publicada en la revista BMJ Medicine, analizó a más de 415,000 participantes y encontró que el uso regular de estos suplementos estaba asociado con un 13% más de riesgo de desarrollar fibrilación auricular y un 5% más de riesgo de tener un accidente cerebrovascular.
Sin embargo, para las personas con enfermedad cardiovascular preexistente, el uso de aceite de pescado mostró efectos protectores contra la progresión de su enfermedad. En estos casos, se observó una reducción del 15% en el riesgo de pasar de fibrilación auricular a un ataque cardíaco y un 9% menos de riesgo de progresar de insuficiencia cardíaca a la muerte.
Los expertos recomiendan precaución al usar suplementos de aceite de pescado si se está en buen estado de salud y sugieren que una dieta cardiosaludable con fuentes naturales de omega-3, como el pescado graso, podría ser más beneficiosa.