Los residentes de Jasper, Alberta, se preparan para regresar a su hogar después de que un devastador incendio forestal arrasara con gran parte de la comunidad. La noticia de que podrán volver a sus hogares este viernes ha generado una mezcla de ansiedad y alivio entre los más de 5,000 evacuados que han estado viviendo en refugios temporales y hoteles en las últimas semanas.
El incendio, que comenzó el mes pasado, destruyó más de 300 de las aproximadamente 1,100 estructuras en Jasper, incluyendo hogares, negocios y edificios públicos. La magnitud de la destrucción ha dejado a muchos residentes con sentimientos encontrados sobre su regreso. Clara Adriano, quien ha operado un servicio de lavandería comercial en la comunidad desde 2017, expresó su aprehensión sobre dejar su habitación de hotel en Calgary y regresar a Jasper. “Voy a ver nuestro negocio destruido. Pero estoy agradecida de que nuestra casa aún esté intacta”, comentó Adriano en una entrevista.
El anuncio del plan de reingreso vino acompañado de una advertencia: aunque la comunidad se considera segura, muchos residentes encontrarán condiciones inhóspitas debido a la magnitud del daño causado por las llamas. En los barrios más afectados en el lado oeste de la ciudad, los propietarios pueden no tener acceso a servicios básicos como gas natural o agua corriente.
El Primer Ministro de Alberta, junto con funcionarios locales, ha asegurado a los residentes que se están tomando todas las medidas necesarias para garantizar su seguridad y facilitar el proceso de reconstrucción. Sin embargo, la realidad es que el camino hacia la recuperación será largo y desafiante. “Hay tantas incertidumbres en este momento, para todos nosotros”, dijo Adriano, reflejando el sentimiento de muchos de sus vecinos.
La comunidad de Jasper ha sido conocida por su fuerte sentido de unidad y resiliencia, y este espíritu será crucial en los próximos meses. Los residentes con hogares aún en pie han sido advertidos de que sus propiedades pueden no ser habitables debido a daños internos y que los servicios básicos siguen siendo extremadamente limitados. Algunos residentes viajarán a Jasper simplemente para inspeccionar los restos de sus hogares o negocios destruidos.
Además de la pérdida material, el impacto emocional de regresar a una comunidad devastada será significativo. “Va a ser difícil ver las casas y negocios de nuestros vecinos reducidos a escombros”, dijo Adriano. La comunidad está trabajando en conjunto para proporcionar apoyo emocional y recursos a aquellos que más lo necesitan durante este tiempo difícil.
El estado de emergencia sigue vigente en el municipio, y los residentes deben estar preparados para evacuar nuevamente en cualquier momento, ya que la alerta de evacuación por incendios forestales sigue en efecto. Las autoridades han instado a los visitantes a mantenerse alejados de la zona por el momento para permitir que los residentes se concentren en su recuperación.
Mientras los residentes de Jasper se preparan para regresar a su hogar, enfrentan una mezcla de ansiedad y alivio. La tarea de reconstruir lo que se perdió en el incendio será ardua, pero la comunidad está decidida a superar este desafío con resiliencia y unidad. La recuperación será un proceso largo, pero con el apoyo mutuo y la determinación, Jasper se levantará de las cenizas más fuerte que nunca.