La demolición de un edificio en el centro de Toronto, que se encontraba en riesgo de colapso, continúa a medida que las autoridades trabajan para garantizar la seguridad de la zona. El edificio, ubicado en Dundas Street West y Augusta Avenue, comenzó a mostrar signos de inestabilidad el viernes por la tarde, lo que llevó a una evacuación de emergencia y al cierre de varias calles adyacentes.
El incidente se desencadenó cuando trabajadores de la construcción, que realizaban un proyecto cercano, notaron que el edificio de dos pisos se inclinaba peligrosamente hacia la calle. Inmediatamente, se dio aviso a las autoridades, y equipos de emergencia, incluyendo bomberos y policía, llegaron al lugar para evaluar la situación. El edificio, que alberga negocios en la planta baja y apartamentos en el segundo piso, fue evacuado junto con los edificios adyacentes, desplazando temporalmente a ocho familias que han sido acogidas por la Cruz Roja.
Durante la noche del viernes, se desplegó una excavadora para comenzar la demolición controlada del edificio, que ya había sufrido un colapso parcial. Los equipos de demolición trabajaron meticulosamente para derribar la fachada y el techo comprometidos, con el objetivo de evitar un colapso incontrolado que pudiera poner en peligro a los transeúntes y causar daños adicionales.
El subjefe de bomberos, Jim Jessop, declaró que la prioridad es llevar a cabo la demolición de manera segura y controlada. “La escena está estabilizada en este momento y no hay riesgo para el público”, afirmó Jessop. Además, señaló que no se han reportado explosiones ni incendios que hayan causado los problemas estructurales, y que la rápida respuesta de los equipos de emergencia ha sido crucial para manejar la situación.
El cierre de Dundas Street West entre Augusta y Denison Avenue ha generado un impacto significativo en el tráfico y en el servicio de transporte público de la TTC. Las autoridades han indicado que la calle permanecerá cerrada “por el futuro previsible” mientras continúan los trabajos de demolición y limpieza.
La comunidad local ha expresado su preocupación por el incidente, ya que el edificio en cuestión es una estructura histórica que ha sido parte del paisaje urbano de Toronto durante décadas. Sin embargo, la seguridad pública es la prioridad principal, y las autoridades están tomando todas las medidas necesarias para garantizar que el área sea segura antes de permitir el regreso de los residentes y la reapertura de las calles.
Este incidente destaca la importancia de la vigilancia y el mantenimiento adecuado de las estructuras urbanas, especialmente en áreas densamente pobladas. Las autoridades han instado a los propietarios de edificios a realizar inspecciones regulares y a tomar medidas preventivas para evitar situaciones similares en el futuro.
Mientras tanto, las familias desplazadas están recibiendo apoyo y asistencia, y se espera que puedan regresar a sus hogares una vez que se complete la demolición y se declare segura la zona. La comunidad de Toronto sigue unida en su esfuerzo por superar este desafío y garantizar la seguridad y el bienestar de todos sus residentes.