En un nuevo episodio de tensiones en el Mar de China Meridional, China y Filipinas se han culpado mutuamente por una colisión entre sus barcos guardacostas. El incidente ocurrió el sábado cerca del Banco de Sabina, una zona disputada que ha sido un punto de conflicto recurrente entre ambos países.
Según las autoridades filipinas, un barco chino “embistió directa e intencionalmente” a su buque guardacostas, el BRP Teresa Magbanua, mientras realizaba operaciones legales dentro de la Zona Económica Exclusiva (ZEE) de Filipinas. Por su parte, Beijing acusó a Filipinas de “deliberadamente” chocar contra su barco guardacostas, alegando que las embarcaciones filipinas ignoraron repetidas advertencias y actuaron de manera peligrosa.
El Comodoro Jay Tarriela de la Guardia Costera de Filipinas informó que el Teresa Magbanua sufrió daños tras ser golpeado “varias veces” por el barco chino. A pesar de la colisión, no se reportaron víctimas. Tarriela condenó las acciones de China, calificándolas de «acoso y actividades intimidatorias».
Por otro lado, la Guardia Costera de China instó a Filipinas a retirarse del Banco de Sabina, prometiendo «frustrar resueltamente todos los actos de provocación, molestia e infracción». Beijing también culpó a Estados Unidos y su alianza con Filipinas por las crecientes tensiones, acusando a Washington de “envalentonar” a Manila para realizar «provocaciones imprudentes».
El Banco de Sabina, conocido como Xianbin Jiao por China y como Banco de Escoda por Filipinas, está situado a unos 75 millas náuticas de la costa oeste de Filipinas y a 630 millas náuticas de China. Esta área es una ruta marítima crucial por la que pasa un comercio valorado en 3 billones de dólares anualmente.
El Mar de China Meridional ha sido un foco de disputas territoriales durante años, con China reclamando casi toda la región, incluyendo partes reclamadas por Filipinas, Brunei, Malasia, Taiwán y Vietnam. En un intento anterior de Filipinas por llevar el caso ante las Naciones Unidas, se determinó que China no tenía reclamos legales dentro de su llamada línea de nueve trazos, una decisión que Beijing se ha negado a reconocer.
La embajadora de Estados Unidos en Filipinas, MaryKay L. Carlson, criticó las acciones de China, calificándolas de «violaciones peligrosas del derecho internacional». “Estados Unidos condena las múltiples violaciones peligrosas del derecho internacional por parte de la República Popular China, incluyendo el embestimiento intencional del BRP Teresa Magbanua mientras realizaba operaciones legales dentro de la ZEE de Filipinas”, escribió Carlson en una publicación en X. «Apoyamos a Filipinas en la defensa del derecho internacional».
Observadores internacionales temen que la disputa pueda desencadenar una confrontación mayor en el Mar de China Meridional. A pesar de los esfuerzos recientes de ambos países por desescalar los conflictos inmediatos en el mar, incidentes como este subrayan la volatilidad de la región y la necesidad de soluciones diplomáticas duraderas.